Franco Armani, ante el país en el que consagró su carrera

El sueño de Franco Armani se hizo realidad en Rusia. Después de mucha espera llegó el llamado a su selección y pudo jugar en un Mundial como todo futbolista espera. Ahora sigue en el proceso con Argentina y sería uno de los bastiones para el proyecto que está armando la AFA.

Pero antes de todo esto y de enfrentar este martes a Colombia, en partido amistoso en Estados Unidos, el arquero tuvo un largo camino por la Liga Águila, con un inicio bastante difícil pero que después fue marcado por los títulos y el amor de una hinchada que lo convirtió en ídolo.

Llegada y primeros años en Nacional

Durante una gira en Argentina en 2010, Atlético Nacional enfrentó a Deportivo Merlo que tenía en el arco a Armani. En ese amistoso el arquero tuvo una gran actuación y los directivos hicieron la gestión para contratarlo. Con 23 años llegó a Medellín, tenía contrato por un año y se unía al club para ser el suplente de su compatriota Gastón Pezzuti, quien ese momento era un gran referente.

Fueron tres años en los que Franco apenas superó los 50 partidos y se vio relegado a ser el portero de la Copa Águila, un torneo menor. Decidió quedarse a pesar de no contar con continuidades y de tener opciones para irse a otros equipos fuera del país. En este periodo ganó tres títulos, pero en todos fue un actor secundario. Llegaron las criticas, ya que el equipo estaba gastando un cupo de extranjero en un portero suplente.

Consolidación

Pezzuti regresó a su país y Nacional contrató a Luis 'Neco' Martínez, pero su rendimiento en Copa Libertadores no fue el mejor y Armani asumió la titularidad en todos los torneos. El argentino superó una lesión de ligamentos y su nivel fue fundamental para que el equipo ganara la Liga en los dos semestres. Incluso en la Copa Sudamericana fue escogido como el mejor portero del torneo. Fue el año en el que se acabaron las dudas.

Libertadores, Selección y despedida

Siendo el dueño del arco de Nacional, Franco Armani se coronó campeón de la Copa Libertadores en 2016 con un rendimiento muy alto, determinante en las últimas etapas y atajando penales (una de sus fortalezas). Un año antes de ganar este título, el argentino inició el proceso para obtener la nacionalidad colombiana. A pesar que siempre aseguró que lo hizo porque su esposa era de Medellín, dentro de los aficionados y el periodismo se especuló de un posible llamado a la Selección Colombia, algo que él nunca puso por encima al interés de jugar para su país.

Finalmente en 2018 se dio su salida del equipo de Antioquia. Una despedida con el estadio Atanasio Girardot lleno, con lagrimas y promesa. "Mi anhelo es el día de mañana retirarme en la institución (Nacional). Es una promesa que hice y obviamente uno la tiene que cumplir. Es mi deseo”, afirmó Armani tras su paso a River Plate. Se fue de Colombia siendo uno de los mejores extranjeros en la historia del FPC.