Medellín gana pero lo elimina el gol visitante de Sol de América

Nada jugó a favor de Independiente Medellín en esa aspiración de remontar la serie ante Sol de América, que hizo su tarea en Paraguay y se encontró con un gol en el Atanasio Girardot con el que capitalizó gran parte de la eliminación de conjunto paisa en la primera fase de la Copa Sudamericana.

Al Rojo no le bastó ganar 3-1 en casa y crear más de diez opciones, pues luego de su mal partido en el estadio Luis Alfonso Giagni tuvo un desconcentración en defensa, en esa pelota quieta de la que tanto analizó desde la previa, que permitió una anotación y dejó la serie 3-3 para acabar el sueño de continuar en el certamen continental.

La lluvia fue su principal rival. Y no solo por los gigantescos charcos, que impidieron que el balón rodara con facilidad y privaron del buen fútbol. Además, el clima espantó a la afición que los de Rescalvo esperaban como impulso para conseguir darle vuelta al 2-0 que ostentaba el Danzarín.

Luego se atravesó el portero Gerardo Ortiz, figurón en el arranque y al final, con sus atajadas a Leonardo Castro y a Daniel Cataño, en el inicio de un compromiso con buenas sensaciones para el local por el juego que desplegaba y las opciones que llegaron desde el pitazo inicial.

Pero al traste se fue el planteamiento con el gol de cabeza César Villagra (14’), en un tiro libre de Pablo Zeballos que dejó comprometido a Hernán Pertuz. Con ese 3-0 en contra, el ‘Poderoso’ no se resignó y luchó hasta el final por conseguir un resultado épico. Y por poco lo consigue.

Primero fue Pertuz a puro corazón el que corrigió su error para acortar con una anotación de cabeza (20’) después de una buena jugada de Andrés Ricaurte. Ahí hubo gasolina para continuar en la lucha, pero faltó definición en el resto del primer tiempo y no consiguió ponerse arriba en el marcador en las opciones que tuvieron Castro y Cano, en ese campo mezquino con el espectáculo.

Ya para el complemento la lluvia arreció y el DIM no contaba por lesión con Yairo Moreno, lo que le abrió la puerta del juego a Juan Fernando Caicedo, que fue importante para alimentar la ilusión de clasificar, pese a que no había condiciones para jugar y fueron las ganas las que condujeron la historia en el Atanasio, donde tampoco pudo contar en el cierre con Cataño por una molestia.

Un gol de penal de Cano (69’) fue suficiente para encender la llama y empezar una cadena de opciones que puso a un paso del avance al Rojo. Fue Caicedo el encargado de marca ese tercer gol en un desborde de Leo Castro (76’) para llevar al partido a un momento decisivo y con emoción porque el duelo de patio no paró de buscar ese tanto de la clasificación por todas las vías.

Y lo tuvo con un par de apariciones de Castro y en un remate de Mauricio Gómez. Pero fue después de una doble atajada de David González que se consagró el portero paraguayo con la pelota de gol que le sacó a Cano en tiempo de reposición, para evitar que el ‘Medallo’ se quedara con la serie tras dominar por completo el juego de vuelta y crear suficientes chances para haberse instalado en la segunda fase.

En medio de esa lluvia copiosa, que recordó la caída con River Plate el año anterior, se despidió el elenco escarlata del torneo en el que quería ser protagonista con la frustración de haber sido más que su rival desde lo futbolístico hasta lo individual.

Después de quedar fuera de la Sudamericana, el Rojo de la Montaña se enfocará en el primer duelo con Junior por los cuartos de final de la Liga, serie que inicia el domingo en Barranquilla.