Giovanni Hernández: "Me querían River, Boca, Racing..."
'El Príncipe' rememoró con AS sus temporadas en Colón y Junior, rivales este jueves por Copa Sudamericana. Reveló que sintió "temor" cuando llegó a ambos equipos.
De la ovación en el ‘Cementerio de los elefantes’, cuando se deslizaba en el césped, se ensuciaba el uniforme y le quitaba la pelota al rival, a la celebración con Junior de dos títulos de Liga en el balompié colombiano, ya en la madurez de su carrera. 'Ole, ole, ole, Giovanni, Giovanni', recuerda que le entonaban en el Metropolitano de Barranquilla, luego de que se ganó las simpatía de los hinchas del 'Tiburón', equipo al que llegó con temor, "porque cuando iba con la Selección Colombia, no era muy bien visto, y cuando enfrentaba al Junior, me decían muchas cosas, que era normal", reveló Giovanni Hernández Soto (Cali, 17 de junio de 1976). Jugó cuatro temporadas con Colón y cinco con Junior.
'El Príncipe', un virtuoso con el cuero desde su infancia, maduró a los golpes, sufriendo la vehemencia de los imponentes jugadores de otrora en Colombia, y soportando la agresividad de los mediocampistas de marca en Argentina. 'Carepa' Gaviria (fallecido futbolista colombiano) "me dejó una cicatriz para toda la vida. Yo jugaba para Medellín y él con Cali. Me bajó los taches desde la parte posterior de la rodilla hasta el gemelo".
Y agregó: "Cuando llegué a Argentina, obviamente que sentí temor, al ver esos volantes de marca tan agresivos y la forma en la que el arbitraje dejaba jugar, para que el fútbol fuera más intenso. Después de observar cómo era la situación, llegó la adaptación, entonces, solo les mostraba el balón, jugaba a uno o dos toques y miraba para un lado y se las tiraba para el otro. Por eso, me querían tener, River, Boca, Independiente, Racing, los más grandes, aunque eso significó una gran frustración. En esa época el dirigente pensaba más en el empresario que en el jugador".
¿Cuál era el 'Carepa' Gaviria del fútbol argentino?
"Alcancé a enfrentar a Mauricio 'Chicho' Serna, a Sebastián Bataglia, Rolando Schiavi, Meléndez en Estudiantes, Somoza. Había una cantidad de jugadores que eran 'hachas', y eso me ayudó a madurar muchísimo. En todos los partidos había 'boquilla', que te voy a agarrar, te voy a dar duro, te voy a joder el tobillo, la rodilla, pero yo ya no tenía temor y jugaba al fútbol".
¿A cuál de los equipos grandes de Argentina estuvo más cerca de llegar?
"A Boca, cuando lo dirigía el Chino Benítez. Él dijo, 'quiero a Giovanni Hernández, a nadie más, en la posición de volante 10'. Boca ofreció pero Colón pidió mucho dinero y se frustró eso. Fue uno de los motivos por los cuales decidimos no continuar en Argentina, y fue cuando se dio el paso a Colo Colo de Chile".
Llegar a Argentina era la meta de los jugadores colombianos en otrora…
"En ese entonces, se hablaba mucho del fútbol argentino, más que de cualquier otra Liga, porque allá se formaban o se forman los jugadores con una mentalidad más fuerte para enfrentar los partidos y la vida, y ser el mejor cada día. Cuando tuve la oportunidad de jugar allá, me di cuenta que era verdad. Por eso hoy vemos las carreras de Juan Fernando Quintero, de Falcao García, de James Rodríguez… El argentino desayuna, almuerza, come y merienda fútbol, siempre se habla de fútbol".
¿Y qué fue lo que más lo impactó de esa cultura argentina?
"Los padres de los recién nacidos me pedían que los sacara a la cancha para tomarles una foto. Me daba mucho temor por lo delicados que son los bebés en sus primeros días. Ahí uno se da cuenta la dimensión que le dan al fútbol. Hoy me escriben por Instagram y me cuentan que ya los niños están grandes y muchos de ellos en Santa Fe se llaman Giovanni. Eso para mí es de mucho orgullo".
¿En el fútbol argentino se pensaba más anteriormente?
"Siempre ha sido el mismo, solo que se jugaba con mucha intensidad. Las pretemporadas en Argentina son de locos, por la cantidad de días. En el fútbol argentino, la mentalidad de cada uno es no dar un balón por perdido, por eso, 'se le tiran a un tren'. Esa escuela es fundamental para cualquier jugador que quiera salir adelante. Muchas veces, se corre más que lo que se puede jugar, sin embargo, la escuela de River Plate prioriza el jugar a ras de piso, contrario a los de Boca que corren, meten y no dejan jugar al contrario".
Sus vivencias con Alfio ‘Coco’ Basile…
"Es una persona que se hacía respetar. Cuando hablaba bajito, era como si estuviera gritando, por su tono de voz ronco. Sabía escoger sus equipos. Ese Colón del 'Coco' era uno de los equipos que mejor jugaba en el fútbol argentino. Estábamos con 'Totono' Grisales, Gerardo Bedoya, Estaban Fuertes, Estévez, Cata Díaz, Tombolini, Romagnoli, Piccoli. Jugábamos a ras de piso y dábamos felicidad en todos los campos".
Su llegada al Junior en la madurez de su carrera…
"Ya jugaba en varias posiciones, le hacía el relevo al marcador de punta, me posicionaba como 9 y me tiraba al piso, que fue una de las cosas que aprendí en Argentina, porque yo no marcaba y la gente me chiflaba y me decían 'pecho frío', porque no ayudaba al equipo a recuperar el balón, entonces, empecé a tirarme al piso y veía que la gente saltaba de alegría cuando yo hacía eso".
La vuelta por los Octavos de final de la Sudamericana, entre Colón (0-1) Junior…
"Hoy en día, cualquiera le puede ganar a cualquiera. Santa Fe es una ciudad pequeña, donde la gente tiene mucha pasión hacia los dos equipos, Unión y Colón, que son la mayoría. La cancha está cercana a la tribuna y a los alrededores hay un pozo con agua. Cuando yo estuve, ahí perdían todos los grandes, y le hacíamos honor al remoquete del 'Cementerio de los elefantes'. El estadio va a estar lleno, lo cual será una ayuda grande para Colón. Junior tiene que saber manejar con jerarquía ese bullicio. Junior tiene muy buen equipo y Colón se paró bien en Barranquilla. Va a ser un partido lindo, por donde se le mire".
