Catalina Usme, de la reflexión en la crisis a su futuro en América

“Reconstruir el grupo desde la parte humana es lo importante”. Catalina Usme dejó de lado el aspecto deportivo para centrarse en lo emocional luego de otro golpe al anfitrión, pues América de Cali cayó 2-4 ante Internacional de Porto Alegre y quedó al borde de la eliminación en la Copa Libertadores Femenina.

“Fue un partido extraño después de que marcábamos. No se lo atribuyo a nada, hace parte de la vida de un deportista. Cuando las cosas no van bien hay que asumirlo con madurez y responsabilidad. Lo que pasa es que cuando las cosas no van bien, ver lo malo es super fácil. El equipo debe concentrarse en el ‘para qué’ y en lo que debemos aprender de lo que sucedió. Es una manera responsable y energéticamente tranquila de asumir las cosas. No vamos a ser las mejores porque ganamos, ni las peores porque perdemos y ahorita no nos vamos a colgar de un palo porque las cosas no salieron”, le dijo a los medios de comunicación en la zona mixta.

La capitana del Rojo habló de renovación, de “un nuevo aire” para el equipo, y cuando se le preguntó si se incluía en ese proceso, respondió: “He dicho que quiero una experiencia internacional, pero estoy tranquila en este momento y no estoy en el punto de: ‘¡Es que me quiero ir y me voy a ir!’, no, para nada”.

América empató dos veces el partido, pero inmediatamente volvió a estar abajo en el marcador. El rival le anotó dos goles sacando del medio con jugadas calcadas: Apertura por la izquierda, avance por esa banda, centro y finalización por el medio. Sin embargo, para la ‘10′, que llegó a 32 goles en la historia de la Copa en la que es la máxima artillera, el desafío va más allá de encontrar errores en el video-análisis.

“Habrá tiempo para sentarnos, hablarlo, discutirlo, y más allá de lo que pasó en la cancha, es lo que pasa con cada una, es sentarse y decirles: ¿'Estás bien, te puedo ayudar en algo?’. Reconstruir el grupo desde la parte humana es lo importante. Queda el reto del partido con Nacional y lo daremos todo sin importar lo que pase en Bogotá. Confiamos en que se den las cosas y si no se dan, también está bien y hay que asumirlo con madurez”, agregó Usme.

Un equipo exigido en muchos aspectos

El cambio del América de Liga al de Copa: “Hemos tenido cambios de entrenador en el último tiempo, seguimos siendo jugadoras para seguir la línea que cada uno quiere. Yo no he sentido tanto cambio dentro de la cancha. El equipo tiene que entrar en una renovación natural, es normal que pase en todos los equipos. El equipo necesita un nuevo aire, un descanso, muchas jugadoras venimos de jugar muchas cosas este año, nos ha pesado un poco la parte física, pero no siento que haya cambiado la estructura ni la disposición dentro del campo. A nivel personal cada una carga con otras cosas que la persona de afuera no ve, seguimos siendo seres humanos”.

‘Reconstruir’, el reto en América: “Tranquilidad, no podemos rasgarnos las vestiduras porque las cosas no estén resultando. Ahora lo que me compete son ellas, su estado de ánimo, lo que hay detrás de cada una, su parte personal, lo que duele. No es momento de ver la parte deportiva, sino la parte humana, cómo reconstruir a cada una. Ese es el reto, no solo ver en qué fallamos en la cancha. Yo sigo creyendo en este equipo, en lo juiciosos que fuimos a la hora de decidir traer el equipo como estaba, sabíamos quién era cada una y lo que podía dar”.

Orgullosa de su equipo y con la fe intacta

¿Habló con las jugadoras como capitana?: “Hay que dejar que cada una haga su duelo. Sacar lo que uno tiene en su alma está bien. Si quieren llorar, que lo hagan, hay que permitirse eso. Siguen siendo seres humanos, no solo deportistas que tienen que ganar y hacer las cosas siempre perfectas. No les dije nada, uno tiene que ser respetuoso con el duelo de cada una”.

Críticas y lo que destaca del equipo: “Yo no leo porque o si no me pego un tiro. La gente es cruel y tiene memoria a corto plazo. Rescato todo: el amor, la entrega, la pasión, lo que dejan día a día. Anoche pensaba lo duro que es ser deportista de alto rendimiento, nadie que no haya pasado por acá lo entiende. Uno llega a un punto de la vida en el que evalúa sus prioridades, ¿va a ser el fútbol siempre?. Al final nadie sabe con lo que cargan ellas todo el tiempo. Todos vamos a fallar en la vida en cualquier cosa que hagamos, pero eso te construye como ser humano. Si no caemos no vamos a aprender, pero resalto todo, amo ese equipo. Si perdemos está bien, no nos vamos a matar por eso. Quizá el día de mañana las cosas salen mejor y la gente va a salir feliz, de eso se trata”.

Fe intacta ante Nacional (U): “Si no tuviéramos fe para qué vamos a salir a jugar. De eso se trata, de salir con la actitud y la fe intacta de que las cosas se van a dar. Que pase lo que tenga que pasar. Si va a ser para nosotros, va a ser. Ferroviária entró con 4 puntos, a medias, y quedó campeón. Uno nunca sabe, el deporte es eso, hoy te matan, mañana sos campeón y sos el mejor. Perdimos, hay que asumirlo con responsabilidad y madurez”.

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