Los inicios de Jhon Mario, el rebelde y atrevido '10' bogotano
César Arenas, primer DT de Jhon Mario Ramírez, recordó en AS porque fue uno de los mejores representantes del fútbol popular y de la gambeta.
En los años 90 hubo un jugador que hizo soñar a toda una generación. Su gambeta, pausa y alegría con la que jugaba, se convirtieron en charlas de colegios, universidades y barrios en Bogotá los lunes en la mañana. Jhon Mario Ramírez siempre fue fútbol popular y el ídolo atrevido de la capital.
Su esencia será recordada por siempre, porque fue el que muchos quisieron ser. César Arenas, primer entrenador del bogotano en Apuestas Monserrate, club que lo vio por primera vez y que lo potenció para llevarlo a la profesional, habló en AS Colombia donde recordó entre lágrimas sus inicios y su importancia en el fútbol bogotano y colombiano.
El micro-fútbol le dio la pisada y la rebeldía para ser un diferente dentro de la cancha. Aunque los problemas económicos por poco acaban con todo, una promesa a su mamá hizo que el fútbol se convirtiera en su mejor opción de vida. Cuando llegó a Millonarios y Vladimir Popovic lo puso en donde mejor se sintió hizo que El Campín se llenara.
Recuerdos y la importancia de Jhon Mario Ramírez
Recuerdos inolvidables: "Recuerdo todo, fue un jovencito que salió de Cazucá, jugaba micro cuando pequeño, llegó a nuestro equipo Apuestas Monserrate por un profesor de su colegio, tenía 12 años. Jugaba siempre micro porque le gustaba mucho, pero logramos atraerlo al fútbol 11. Entrenábamos en el Jazmín (Barrio de Bogotá), en una cancha pelada, llegaba en bus y como la familia era pobre, se subía por la puerta de atrás, así empezó todo. Luego su talento fue a selecciones Bogotá, a selecciones Colombia juvenil y después llegó a Millonarios, el equipo nos hizo una propuesta, llegamos a un acuerdo, y la mayoría del pase se lo entregamos a él para que viviera y tuviera ese ingreso".
La importancia de su historia: "Fue un jugador diferente, excepcional, de esos que salen muy poco y que son figuras como Maradona, Pelé o Messi, era excepcional. Tenía una capacidad para pisar la pelota, para gambetear, para hacer cosas que nadie pensaría que salían en una jugada en medio de tres jugadores".
El valor que le dio Jhon Mario a Apuestas Monserrate: "Lo más importante para mí es poder ayudar a un jugador que se encuentra en la droga, que lo pueda sacar de los vicios o de la delincuencia. Jhon Mario lo valoró mucho, no solo en la parte sentimental, también en la deportiva (...) Todos los entrenadores que tengo, me decían que él se expresaba de una forma espectacular y que iba a ser un gran DT".
El representante del fútbol popular en Bogotá
Representar el fútbol popular: "No solo Jhon Mario, también Germán Casas que también falleció esta semana y es hijo de la casa. Ellos dos tenían muchas similitudes, a pesar que uno era defensor y el otro atacante. El defensor atacaba con la misma facilidad que defendía y Jhon Mario defendía con la facilidad que atacaba. Ellos tenía mucho temperamento, a veces su forma de actuar era arrogante, pero era su ambición de ser los mejores, el jugador bogotano es frío y temeroso, pero ellos eran atrevidos y de una gran firmeza. Ellos son representantes de ese fútbol de la calle, de barriada".
Brillar en Millonarios: "Jugó profesional porque al yugoslavo (Vladimir Popović) que le dio la oportunidad le jugaba como tercer volante de contención, quitaba la pelota y arrancaba y así cosas majestuosas. Le pegaba a la pelota de gran calidad".
Escases de rebeldes y anécdota con el '10'
El problema de buscar nuevos Jhon Marios: "En Colombia se mira mucho lo que pasa en Europa con los jugadores juveniles y no miramos que lo mejor que tenemos está acá. Aquí estamos estamos impidiendo a los jugadores de tener sutileza, inteligencia, de tener habilidad, de pisar el balón. Ahora, cuando ellos tienen el balón se les dice cada rato suéltela y no les dan libertad, los entrenan como jugadores profesionales. A él le dimos libertad vigilada".
Anécdota inolvidable: "La mamá lo iba a retirar del fútbol porque no estaban en una buena situación económica, vivían en una pieza donde tenían cocina, dormían y no tenían trabajo. Ella decía que no se lo podía aguantar porque destruía todos los zapatos, que mantenía en la calle y que tenía que estudiar porque tenía que tener un mejor futuro. Él me llamó y me dijo: 'Profe mi mamá no me quiere dejar jugar más, háblele por favor'. Yo fui y nos pusimos hablar del talento que tenía, luego 25 minutos después, Jhon Mario se le arrodilló y le dijo: 'mamá le pido que me deje jugar al fútbol, le quiero dar su casa, déjeme que con estas piernitas le doy su casa'. Luego firmó su primer contrato en Millonarios y lo primero que hizo fue comprar la casa por cuotas".