De la indisciplina con 'Polilla' a la rebeldía con los portugueses
Del reconocido por los aficionados 'Polilla' Da Silva, al incógnito Pedro Felício Santos, quien clausuró el desorden que dejó el saliente entrenador, indolente con el equipo que le dio trato de ídolo.
América no llegó a la meta, porque varios de sus jugadores renunciaron al esfuerzo sin haber sudado, apenas en el inicio del campeonato. En el tramo final, el equipo vallecaucano, mutó del desgano que evidenció siendo dirigidos por Jorge Da Silva, a la rebeldía que irradió un desconocido cuerpo técnico portugués, que asumió con sorpresa en medio de un tempestuoso momento. Tuvo la oportunidad de confeccionar un grupo en el inició de temporada, pero no logró siquiera generar un buen clima, y los dejó a mitad de camino.
Las dos caras
‘Polilla’ Da Silva no se quitó el uniforme de jugador en los cerca de tres meses que estuvo al frente del América durante el presente año. Fue permisivo en la indisciplina de sus dirigidos dentro y fuera del campo. Demostró más compromiso con la exigencia de los estímulos económicos hacia el equipo, que con los resultados deportivos. Nunca estuvo del lado de quienes lo contrataron ni procuró zanjar las diferencias que se reflejaron en los resultados. El uruguayo no pudo integrar un equipo y los abandonó a mitad de camino. Se fue, tras registrar cuatro victorias, un empate y seis derrotas.
Tras el desatino del presidente del equipo, Tulio Alberto Gómez, al nombrar como interino a Carlos Fernando Asprilla -perdió los dos partidos que dirigió- dio un inesperado viraje, contrató a tres portugueses, con nada por perder y todo por ganar, y su ensayo le está dando resultados. Los lusos, quienes habrían llegado para fortalecer un proceso en las divisiones menores, mantendrían el cargo en el primer equipo.
Desde los primeros entrenamientos, los jugadores del América expresaron agrado por la metodología de los liderados por Pedro Santos; todos los trabajos con el balón, desde la entrada en calor, y repeticiones en espacio reducido, en pos de una rápida recuperación del balón tras la pérdida
Santos, ha sido obediente con las pretensiones de los dirigentes; deseosos de madurar con afán a los que compiten como Sub-20, para transferirlos al exterior. El portugués no volvió a contar con Harrison Canchimbo, ni con Yámilson Rivera ni Félix Micolta. Y promovió a varios juveniles, entre ellos, Jhon Quiñones Saya, quien ha sido titular en los dos anteriores partidos. Los técnicos dependen de los jugadores y es labor de los primeros, motivar la rebeldía de los que saltan al campo. Al equipo vallecaucano, le sobró actitud con el nuevo cuerpo técnico, que en cinco partidos, ganaron tres, perdieron uno de forma inmerecida, y empataron la pasada jornada en la visita al Once Caldas.