Fútbol
Lillo no fue amenazado, pero directivos de Nacional sí
Nacional - Envigado en vivo online: Liga Águila II
El fin de la era Lillo se dio para liberar al club y a los jugadores de presiones por los malos resultados y un estilo que nunca caló en la afición. No hubo en medio amenazas o problemas con los directivos de Atlético Nacional, según lo contó el presidente de la institución, Andrés Botero.
“El profesor Lillo quería que los jugadores no vivieran en esa tensión permanente (…) vio el ambiente enrarecido y pensó que no era bueno para él y su familia”, reveló el dirigente.
Luego entró en temas más complejos como las versiones de una amenaza que hubiese obligado al entrenador español a renunciar por la eliminación de la Liga II-2017, que provocó una larga e intensa protesta de la afición en el Atanasio Girardot solicitando su salida.
“Hasta donde sé, él no ha sido amenazado de muerte como han sido amenazado de muerte varios del club en los últimos meses… Directivos que ya no quiero mencionar. Espero que haya pasado, eso fue recién entramos nosotros acá”, declaró Botero.
Agregó que como director técnico europeo “no está tan acostumbrado a lo que pasa en esta parte del mundo y a como son los hinchas de Argentina, Colombia o Brasil. Es un ambiente un poco más duro. Eso influye en la toma de su decisión”.
El presidente contó que la noche del lunes ‘Juanma’ Lillo lo invitó a su casa en Llanogrande, donde estuvieron charlando largo tiempo, casi hasta las 9 de la noche, sobre “distintos tópicos” y el futuro de Nacional.
Allí, según Botero, le dijo: “Yo ya hice mi ciclo en Nacional y estoy contento. Lo mismo dijeron el mismo del cuerpo técnico. De verdad que queremos dar un paso al lado, no queremos seguir con esta presión que tiene toda la hinchada. Queremos dejarlos a ustedes libres y que los jugadores se sientan más tranquilos”.
Reveló también que en la mañana, el estratega español se reunió con los jugadores para compartirles su decisión.
“Es increíble la tristeza de los jugadores viendo que el ‘profe’ se retiraba. Eso parecía un entierro, ellos estaban muy tristes”, finalizó el dirigente.
