El Nápoles rescata un punto y se complica la segunda plaza
Los de Sarri interrumpen una racha seguida de seis victorias seguidas a domicilio. Mertens y Milik marcaron para los partenopei, Becardi y Mazzitelli, para los locales.
El Nápoles complica su carrera para el segundo puesto no pasando del empate en el campo del Sassuolo, que interrumpió la racha napolitana de seis victorias consecutivas lejos del San Paolo con un intenso 2-2. Sarri confirmó once por tercera vez consecutiva, algo nunca visto en este curso, apostando otra vez por Ivan Strinic como lateral en el lugar de Ghoulam, cuyo adiós es casi seguro en este verano. En la delantera, el tridente ligero Callejón, Mertens, Insigne, con el italiano que celebra su renovación hasta 2022 firmada ayer durante una rueda de prensa con el presidente De Laurentiis.
La primera parte no se encendió hasta su último cuarto de hora, cuando Callejón (que golpeó el exterior del palo) y Berardi tuvieron ocasiones para abrir la lata. Los partenopei (siempre de blanco, no visten de azzurro en la liga desde noviembre) controlaban más el balón, aunque el conjunto de Di Francesco, también con el 4-3-3 y una jovencísima medular (Pellegrini, Sensi, Duncan), no sufrió muchos apuros.
En la reanudación llegaron más emociones y goles. El Nápoles rompió el partido en el 52' con Dries Mertens, que aprovechó una gran asistencia de Callejón tras el típico pase vertical de Hamsik y, con la cabeza, firmó su tanto número 28 en su increíble curso. El mismo capitán napolitano, no obstante, apenas siete minutos después le regaló el empate a los locales con un desastroso testarazo hacia atrás que Berardi aprovechó para marcar su primer tanto de jugada desde el pasado 28 de agosto.
Los sureños, que se jugaban mucho, se volcaron al ataque y se toparon dos veces con el larguero, con un gran lanzamiento de falta de Mertens y una rosca de Insigne. Hasta que llegaron los últimos 10 minutos, una verdadera batalla: en el 80' los locales se adelantaron con Mazzitelli, totalmente olvidado por la defensa napolitana en el corazón del área después de un chut de Cannavaro neutralizado por Pepe Reina. Sarri, desesperado, sacó a Arek Milik pasando al 4-2-3-1, y el polaco con una bonita volea tras un córner marcó su primer gol tras la ruptura del ligamento cruzado sufrida en octubre.
El Nápoles apretó hasta el último segundo y estuvo cerca de una victoria que habría sido merecida con Mertens, cuyo cabezazo, con la puerta vacía, fue desviado fuera justo por el excapitán azzurro Cannavaro. No pudo ser, y ahora el rival del Madrid en los octavos de Champions podría ver alejarse al Roma, que mañana jugará en el campo del Pescara, colista de la Serie A. Con un triunfo, los capitalinos alargarían su ventaja a 4 puntos.
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