Vásquez en la B: de la guerrilla a la vitrina del América
En días próximos expira el contrato del exdelantero como gerente corporativo y deportivo de los rojos. “Quiero continuar”, expresó en diálogo con AS Colombia.
Ninguna sensación fue igual. El pasado 27 de noviembre cuando el árbitro Wilmar Roldán sujetó el balón con su antebrazo derecho y despertó a los americanos alborozados porque la pesadilla de 5 años había terminado, Julián Vásquez experimentó algo extraño, “creo que esa sensación no la había tenido nunca, me quité tres toneladas de encima”, cuenta con la naturalidad con la que expresa que poco antes del fin de la tormenta, “en la última jugada con el doble cabezazo en el área, que atajó Bejarano, nos hizo bajar todo a los pies”.
Desolada la tribuna popular y a los alrededores, la gente en estado de gracia. Los protagonistas de rodillas en el césped dando gracias al creador. La felicidad de los americanos generó un contagio que se reprodujo por el mundo, gracias a la Internet, a la televisión.
Tanto protagonismo era impensado 17 años antes, cuando Julián Vásquez se erigió en goleador del Torneo de la B con Itagüí (21 goles), cuando “no televisaban los partidos y nos tocaba ir a jugar a tierras muy difíciles, como Florencia, Caquetá. Los arbitrajes no eran confiables. Había poca presencia de la Policía en los estadios, y el público ejercía mucha presión sobre los árbitros”.
Además, "en los desplazamientos era usual que la guerrilla nos detuviera los buses. En una ocasión, se nos llevaron todo el agua que teníamos para el trayecto y el partido. Era una época muy brava con la guerrilla, era intimidante cuando nos paraban, encapuchados y con fusiles”.
Genera suspicacia un tuit en el que dice que desea continuar en el equipo…
“Lo que pasa es que tengo contrato hasta finales de este mes, firmé por seis meses, mientras se conseguía el objetivo, luego hay que ver si los directivos están contentos con el trabajo que se ha hecho. Había muchos trinos en los que se decía que no continuaría, entonces, expresé que quiero continuar en América y me voy a acercar a hablar con don Tulio (presidente del equipo)”.
¿Qué actitud ha percibido en don Tulio?
“Con don Tulio no he tenido la posibilidad de hablar por estos días, porque he estado fuertemente metido con lo de la Academia del América. Con él he tenido una muy buena amistad (…) La gente me ha manifestado mucho cariño, los hinchas me han recordado las épocas como jugador y lo complementamos con el trabajo administrativo, trajimos 14 jugadores para este semestre y la gente lo ha valorado”.
Con Hernán Torres sí mantiene más comunicación, toda vez que usted incidió para la llegada de él a la dirección técnica…
“Sí, él es muy allegado a mi familia y mantenemos permanente comunicación”.
¿Cómo funcionará la Academia?
“Iniciamos el 15 de noviembre, tenemos tres sedes en Cali y la idea es tener dos más, y estamos vendiendo franquicias a nivel nacional e internacional. Además, tenemos convenios con Tigres de México y Newell’s Old Boys de Argentina”.
¿Qué lo marcó de esta temporada con América?
“El partido frente al Quindío que nos dio el ascenso. Tenía más ansiedad que cuando disputé los títulos como jugador. Se siente más impotencia y las cosas más difíciles. Como jugador tenía ansiedad hasta que entraba a la cancha. Tenía mucha angustia porque se acabara rápido el partido. Se cumplió el objetivo, que no era fácil, porque el equipo llevaba cinco años en la B y nosotros lo logramos en seis meses”.
¿Qué necesita América para ser protagonista de la A?
“Refuerzos en algunas posiciones, porque el equipo tiene una base importante, con un cuerpo técnico muy capacitado. Se necesita continuidad en el proceso”.
¿Darán un golpe de opinión con algún refuerzo?
“Hay refuerzos que marcan la diferencia. Hay que analizar bien, cuántos se necesitan y escogerlos de la mejor manera”.
¿Se ha comunicado con Giovanni Moreno sobre un interés de venir al América?
“Con Giovanni tengo permanente comunicación, porque somos amigos. Los números de él son muy complicados, porque gana una cifra que en Colombia ningún equipo la puede pagar. Es imposible”.
¿Y es imposible que América repatrie algún jugador?
“Es muy difícil competir con salarios de Europa o de México. Todo depende de lo que quiera el jugador, si desea volver a Colombia, tenga sueños de gloria, sea hincha del América. Hay varios factores que pueden contribuir a que los jugadores vengan. Si existiera alguna posibilidad, sería muy interesante para el América”.