Cristiano Ronaldo: a Lisboa con el Balón de Oro casi asegurado
Su exhibición en el Calderón le dispara como favorito. La votación para decidir el ganador del trofeo finaliza el 25 de noviembre.
Si todavía había alguna duda que Cristiano ganará el Balón de Oro 2016, su actuación del pasado sábado en el Vicente Calderón ha terminado por despejarlas. El crack portugués cuajó en el derbi una de sus mejores actuaciones como madridista y zanjó con un hat-trick cualquier debate sobre la elección de mejor jugador del año. Y lo ha hecho en vísperas de la visita al Sporting de Portugal, el club en el que militó de 1997 a 2003 y con el que debutó en Primera División. Ese acontecimiento sucedió el 30 de septiembre de 2002 ante el Braga. El equipo lisboeta perdió aquel encuentro a domicilio por 4-2 y Cristiano entró en escena en el minuto 69 sustituyendo al rumano Niculae. En aquel momento tenía 17 años.
Con el primer equipo del Sporting de Portugal jugó 30 partidos (1.069 minutos) y marcó tres goles. Precisamente, dos de esos tantos los marcó a la jornada siguiente. El club lisboeta recibió en el antiguo José Alvalade al Moreirense. Cristiano fue titular y deslumbró a todos los allí presentes con un doblete.
Su último encuentro con el Sporting de Lisboa lo disputó el 6 de agosto de 2003. Con motivo de la inauguración del nuevo estadio José Alvalade el Sporting de Portugal disputó en su feudo un amistoso contra el Manchester United. Los locales ganaron 3-1 con una exhibición que impresionó a Alex Ferguson, entonces técnico de los ‘Red Devils’ y a los propios jugadores del club inglés, como desveló años después: “Algunos líderes del vestuario, como Roy Keane o Ferdinad, vinieron a decirme que había que fichar a ese chico. Yo les dije que lo tendríamos dentro de un año, pero ellos insistieron que teníamos que ficharlo ya...”. Dicho y hecho. Ese día se puso punto y final a la etapa de Cristiano en el Sporting y fichó por el United.
Especial. Cristiano tiene marcada la fecha de mañana desde que se llevó acabo el sorteo de grupos de la Champions. De hecho, si marca un gol no lo celebrará, como ya hizo en el encuentro de ida al marcar el tanto que suponía el 1-1. “Es un partido especial, es un equipo especial. Yo quería volver a jugar ante el Sporting, porque que tienen un buen equipo, tienen un buen entrenador y será otro momento especial en mi vida”, afirma Cristiano, que estrenará unas botas conmemorativas inspiradas en aquel encuentro del 6 de agosto de 2003 que cambió su vida.