Martínez Borja: “Aquí no es importante ni ‘Tecla’ ni Borja”
El delantero del América respondió en AS Colombia a la polémica tras el balón de gol que aparentemente le negó a Farías, frente a Valledupar. “Todos saben que soy colectivo”, dijo.
La mesura y pasividad de Cristian Martínez Borja fuera de las canchas contrasta con la rebeldía que expresa cuando toca el pasto, su hábitat; procura hacerlo descalzo, como se lo sugirió Sandra Merino, la guía espiritual que coadyuvó a través de sus oraciones para que Santa Fe se coronara campeón del balompié colombiano luego de 37 años, y conviviera con las victorias, como lo reveló en días pasados el exmediocampista de los ‘Cardenales’ Daniel Torres.
“Lo de descalzarse en la cancha, lo he estado haciendo en el América, junto con William Arboleda. Los hinchas también necesitan tener más humildad, tenemos que dejar de ser soberbios, Dios es el único que nos puede sacar de la B, y lo de Daniel Torres lo viví con él cuando estuvimos en Santa Fe. Doña Sandra es nuestra madre espiritual en el fútbol, y América necesita tener mucha fe, pedirle mucho a Dios", dijo.
"En ocasiones los equipos grandes creen que van a ganar de cualquier forma, pero lo más importante es tener mucha humildad, respetar al rival y pedirle a Dios”, comentó el delantero chocoano en diálogo con AS Colombia, luego de haber celebrado un doblete frente al conjunto vallenato, su segundo con el equipo vallecaucano.
Borja, tan silencioso como trajinado en el fútbol, rápidamente logró una ponderada simbiosis con los simpatizantes americanos, quienes le reconocen su solidaridad, su inteligencia de juego, su técnica individual en virtud de la producción colectiva de los ‘escarlatas’.
Ya ha celebrado ocho goles, frente a Valledupar se alió con Steven Lucumí para aupar a un América que lucía desnortado tras estar abajo en el marcador. No obstante, luego de haber celebrado su primera anotación y poco antes de su segundo gol, protagonizó una polémica acción individual dentro del área… en una posición incómoda, eludió a dos rivales y sin ángulo de tiro terminó rematando débil a las manos del arquero Miguel Torres.
Energúmeno se mostró ‘el Tecla’ Farías tras la acción, el argentino consideró que Borja le negó el balón y lo privó de haber celebrado un gol.
“Cuando hice contacto con el balón, en lo primero que pensé fue en dársela a él (Farias), solo que ya el central se me corrió para donde él estaba. Así es el fútbol y todos saben que soy un jugador colectivo, que me tiro atrás, y la toco con mis compañeros cuando lo debo hacer, pero cuando hay espacio, tengo que patear al arco, para eso soy delantero y me miden por los goles… esto es mucha humildad y todos tenemos que jalar para el mismo lado, para conseguir el ascenso. Aquí no es importante ni el ‘Tecla’ ni Borja, lo importante es América, y primero es Dios, a quien le pedimos que nos dé la bendición de ascender el equipo”, aclaró el delantero de los ‘escarlatas’.
¿Su propósito es terminar como goleador del América?
“Uno como delantero siempre quiere hacer goles, pero el propósito de todos nosotros es ascender. La idea es poder ganar los ocho partidos que nos hacen falta para lograr ese anhelado ascenso que todos queremos”.
¿Siempre entra a la cancha pensando que la va a meter?
“Siempre le pido a Dios que me libre de todo mal y peligro, de cualquier lesión, y que me dé la oportunidad de marcar, que es lo importante para uno como delantero”.
Parece que lo hiciera fácil…
“Los partidos del América siempre son complicados, pero es una bendición de Dios poder estar ahí y tener esa linda oportunidad de marcar goles en un equipo tan importante como lo es el América".
Y cuando se está derecho, le puede pegar en la canilla y la mete…
“Eso hace parte de la bendición que Dios nos da de estar ahí. Toca seguir así”.
Remontar un marcador llena de más consistencia mental…
“Es importante remontar, pero esperemos que no nos vuelva a tocar y que estemos siempre adelante en el marcador y poder conseguir los triunfos de una manera diferente”.
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Al América siempre le ha costado en las finales…
“Lo que es difícil para el hombre es posible para Dios y hay que pedirle a Dios que nos dé la bendición”.