Alexis Viera: “En América se patrocinaba la indisciplina”
El exarquero, quien ahora ejerce como Embajador de los ‘escarlatas’, recordó los ratos amargos en sus épocas como jugador del equipo. Dio su decálogo para motivar a los jugadores.
Estruendo en el barrio El Caney en Cali, dos impactos de bala en el cuerpo de Alexis Washington Viera; estrépito en el entorno mundial del fútbol; al arquero, quien para esos días (25 de agosto de 2015) estaba vinculado al entonces Dépor del Torneo del Ascenso, lo ingresaron a cirugía, asegura que en la misma se le detuvo tres veces el corazón. Poco después, le informaron a su esposa, Andrea Espel, “Alexis tiene un uno por ciento de posibilidades de que vuelva a caminar”.
El uruguayo, aunque con dificultad, ya camina, otras veces se moviliza en su silla de ruedas o se apoya en las muletas. En días pasados, publicó en sus redes sociales un par de videos, en el primero ataja un penalti y luego, perdió un duelo desde la misma vía con el exgoleador y ahora gerente del América, Julián Vásquez. Ahora le dicen ‘Embajador’.
“Es un orgullo que me digan ‘Embajador’. Yo quiero estar con los jugadores todo el día y si es posible les pateo. Sigo siendo jugador de fútbol, es lo que pasa por mi cabeza. Mi función es ser el nexo entre los directivos y la hinchada; transmitirles charlas con mucho cariño y amor. Estoy dispuesto a atender a todos los hinchas, desde la China y hasta Colombia. Queremos aprender de todos, si tenemos millones de opiniones, las analizamos y sacamos las mejores, seguramente vamos a ser el mejor equipo del mundo”, comentó Viera en diálogo con AS Colombia.
Apenas tenía el uno por ciento de posibilidades de volver a caminar…
“Y nos dieron mucho, porque el diagnóstico de los médicos era que no iba a volver a caminar. Con todo eso uno demuestra que no estamos solos en la vida. Dios y mi familia son la prioridad. En su momento el siquiatra me dijo que no iba a caminar, que me iban a preparar toda la vida para que yo estuviera en una silla de ruedas. 20 días después de que recibí los disparos, me senté en la cama y me caía, no aguantaba un segundo sentado y empecé a creer lo que el médico me dijo, ese día lloré, pensé que iba a estar todo la vida en una silla de ruedas, pero al otro día se me borró todo eso y empecé a tener fe, convicción y a trabajar durísimo. Esa es la mentalidad que tiene que tener el jugador de fútbol”.
No se quedó en el pasado y siempre piensa en superarse…
“Dios me dio la fuerza en el corazón, estaba muerto y él me dio una oportunidad de vida; además, fui consciente de que si yo me caigo, mi familia se caía. Yo estaba haciendo mi duelo, porque soy un ser humano, pero mi familia sabía que yo lo iba a lograr, porque saben que yo lucho hasta lo último y voy a seguir superándome”.
Vuelve a ponerse la camiseta del América…
“Siempre voy a estar dispuesto a sumarle a esta institución, estoy orgulloso de estar acá; lo que me toque hacer, lo haré con pasión y amor, como siempre lo hice dentro de la cancha”.
Será importante su mensaje para el crecimiento de los jugadores del América…
“Claro que sí, se me pone la piel de gallina. Yo ya conozco dónde está el pozo y debo decirles a los jugadores por donde no deben caminar. Yo tuve a Dios, a mi familia y mi fuerza para salir de ese pozo y la experiencia para poderlo contar”.
Va a ser fundamental para la orientación mental de los jugadores…
“Lo que pasa es que el jugador de fútbol pasó necesidades antes de llegar y de golpe se encuentran con todo… pasan a ser personas conocidas, que cobran buenos sueldos, que salen en los medios de comunicación, que ya se creen el cuento y eso le hace mal al jugador de fútbol, porque suelen conformarse. Mientras que uno ve a Cristiano Ronaldo que es multimillonario y tiene un gimnasio en la casa, porque quiere superarse y ser el mejor del mundo; por ello no tienen vacaciones. Eso es parte de la humildad; no podemos creernos más que nadie, porque hoy sos jugador de fútbol y mañana podés estar sentado en una silla de ruedas”.
Decía Jonathan Álvarez que este equipo es más organizado que cuando estaba en la A…
“Totalmente, es otra cabeza; hoy no se valora la indisciplina; acá se patrocinaba la indisciplina y por eso me enfermé, por el estrés, sabía que estaba luchando por algo que no iba a cambiar, pero me interesa es lo que está por venir y trabajo para que el futuro sea exitoso”.
Ya hubo una depuración en este América, no hay cabida para los indisciplinados…
“Claro y quien quiera hacerlo, ya sabe lo que le pasa, antes de hacerlo el jugador lo va a pensar dos veces. Él que no entienda el mensaje va para afuera”.