Liverpool se pasea en Glasgow y acaricia la clasificación

Goleada, récord de Salah y a un paso del objetivo inicial. Tras la lesión de Luis Díaz el fin de semana ante Arsenal, Liverpool superó 1-7 a Rangers en el Ibrox Stadium y quedó cerca de clasificar a octavos de final. Alfredo Morelos entró al 76′, pero no tuvo opciones de gol.

Al minuto 17 se rompió el cero en Glasgow. Fábio Carvalho perdió un duelo en mediocampo e inició la acción ofensiva del local con toques de primera; asistencia de Ryan Jack y Scott Arfield controló con zurda y definió con derecha a ras de piso desde el borde del área para vencer a Alisson. La pelota quieta fue la vía para la reacción del equipo de Jürgen Klopp: tiro de esquina de Konstantinos Tsimikas al primer palo, donde ganó Roberto Firmino para poner la igualdad, con la que los equipos se fueron al descanso.

Goles sudamericanos para tranquilidad de Liverpool

El segundo tiempo fue todo de los Reds. Joe Gomez, que fue el lateral derecho titular ante la baja de Trent Alexander-Arnold, se escapó por la derecha y puso el centro bajo y preciso para que el brasileño sellara su doblete ganándole la espalda al central y empujándola de primera con el borde interno del pie izquierdo entre las piernas de Allan McGregor [55′].

Once minutos después apareció la conexión sudamericana para darle tranquilidad al visitante: Pase al medio para Firmino, a quien le quedó un poco atrás, pero pegó un saltito para de taco dejársela servida a Darwin Núñez, que de primera definió con pierna derecha. Nada que hacer para el ‘1′ de Rangers.

Salah entró para llevarse la pelota

Eso fue lo último del uruguayo, pues dejó el terreno de juego para el ingreso de Mohamed Salah. Y empezó la fiesta del egipcio. Primero controlando en el área y ganándole con facilidad a Borna Barisic para definir con ángulo cerrado y un puntazo junto al segundo palo [75′].

Su doblete llegó cinco minutos después, pues Diogo Jota lo encontró, el egipcio controló y en medio de tres rivales frenó y con zurda la acomodó al primer palo. Un minuto más tarde firmó su hat-trick, pero esta vez su definición fue al otro lado. 6 minutos y 13 segundos necesitó Salah para anotar el triplete más rápido en la historia de la Champions League, por cierto, los tres goles con asistencias del portugués. Harvey Elliot sentenció el 1-7. Banderazo del juez de línea por posible fuera de juego previo de Salah, pero el VAR rectificó. Todo legal y festejo del juvenil.

Goleada que deja a Liverpool segundo del Grupo A con 9 puntos, a 3 del líder Napoli y 6 por encima de Ajax, al que visitará en la siguiente jornada y un empate será suficiente para asegurar la clasificación a octavos de final. Por ahora habrá que concentrarse en el partidazo del fin de semana ante Manchester City por Premier (domingo 16 de octubre).