¿Por qué los hinchas le han dado la espalda al Cali?
El Vicepresidente señala “una guerra frontal al interior del club”, mientras que los asociados citan, las promesas incumplidas de los directivos y la deficiente comunicación.
Los cantos de sirena que motivaron a una gran mayoría de los asociados a elegir a Juan Fernando Mejía y a Marco Caicedo como novedades en el Comité Ejecutivo, se desvanecieron cuando cesó la pirotecnia y las cortesías de la campaña electoral. De los anunciados estelares que no llegaron en el primer año de ejercicio de la actual Junta Directiva a la admitida deficiencia económica que conllevó a que para el presente campeonato solo sumaran a la plantilla al lateral Mateo Puerta, como alternante de Juan Camilo Angulo.
Entonces, muchos de los asociados y una gran mayoría de hinchas, lastimados en su autoestima por las tres caídas en las tres salidas como locales en el pasado Cuadrangular -apenas sumaron 4 puntos de 18-, además de la nueva incumplida promesa del vicepresidente del club, Marco Caicedo, quien anunció un gran refuerzo que iba a ser del gusto de los aficionados, respondieron con desinterés al llamado para adquirir los abonos (solo vendieron 83). Un poco más de 7.500 espectadores apenas acudieron a los dos últimos juegos que disputaron los ‘verdiblancos’ en su estadio.
Ni el invicto, ni el liderato en la Liga (10 puntos) parece ser un seductor del equipo que dirige Lucas Pusineri. Aunque el DT argentino insiste en que es el segundo mejor inicio de temporada e invita a disfrutar del liderato, el disgusto hacia los procedimientos de Mejía y Caicedo, hacen suponer que están rebasando los recientes resultados deportivos. “El equipo inició bien, y lo debe refrendar frente a otros más competitivos. Y la responsabilidad de que los hinchas y socios estén divorciados del equipo, es de los directivos. Ellos mismos se han encargado de perder credibilidad. Han sido inferiores a lo que prometieron en campaña”, declaró Julio Gordillo, quien aspiró al Comité Ejecutivo en las pasadas elecciones.
Por su parte, el vicepresidente del club, Marco Caicedo, sostiene que el ausentismo en las tribunas de Palmaseca se debe a que, “hay una guerra frontal, civil, al interior del club” y añade, “la gente ha sido intolerante, no entiende el proyecto ni las necesidades que tenemos nosotros para viabilizar el club y para tener una caja positiva. El tema de que no haya habido contrataciones rimbombantes causó algún malestar, sin embargo, estamos confiados en el proceso y en el talento de nuestras canteras”.
A su turno, el asociado Germán Salcedo, admitió que “el hincha sí le está cobrando al Comité y a su Staff por no haber cumplido con lo ofrecido”. Y amplió: “el foco de ellos es defenderse de unos detractores que ellos mismos han cultivado por las promesas incumplidas y por la falta de gestión en algunas áreas. En estos momentos no deberíamos estar preocupados sino ocupados por recuperar el amor que se enfrió. No comparto la decisión de los que decidieron no volver al estadio, sin embargo, la institución no está haciendo nada de manera empática para atraer a los hinchas”.
Deportivo Cali apenas ha recibido dos goles y celebró nueve en los cuatro partidos disputados por Liga. El próximo sábado (4:00 p.m.) visitan al Unión Magdalena y el miércoles siguiente volverán a jugar lejos de su estadio; visitarán a Real San Andrés para disputar la vuelta por los Octavos de final de la Copa Águila -Cali ganó en casa 1-0-.