@As_TomasRoncero

Lucas calidade

Actualizado a 10 de enero de 2018 22:28 COT

El ciclón de Curtis. Así se llama el pueblo coruñés en el que nació Lucas Vázquez hace 26 años. Allí aprendió a ratonear con la pelota, a regatear en corto, a buscarse las habichuelas en las pachangas con los chiquillos de Curtis. El chaval fue creciendo y ya en el Castilla de Morata, Nacho, Jesé, Juanfran y Joselu deslumbró con su capacidad de desequilibrar y su profesionalidad en la presión. Una exitosa cesión al Espanyol sirvió para ganarse el regreso a casa, su casa. Su amado Madrid, cuyo escudo besó en la tanda de penaltis de Milán marcando el camino hacia la Undécima metiendo el primero con una serenidad asombrosa. Ante el Numancia y en un partido trampa con sólo 37.553 aficionados en la gradas y mucho suplente en el pasto (de ambos equipos), Lucas Vázquez fue de los que quiso gritarle a Zidane que él no necesita charlas terapéuticas en Valdebebas. Lucas habla en el campo. Metió los dos goles que evitaron un fiasco sonado. Uno en cada tiempo. Ya lleva cinco este curso, el mejor en esa faceta desde que está en el Madrid. Se está mereciendo la titularidad. ¿Y si probásemos un tridente Lucas-Cristiano-Bale?

Enorme el Numancia. Lo mejor de la fría velada lo pusieron los 4.000 sorianos que se repartieron por las tribunas del Bernabéu, entre ellos el mítico Fermín Cacho, que vino con unos amigos y disfrutó del partidazo de sus paisanos en el Segundo Anfiteatro del Fondo Sur. La mitad de los 4.000 llegaron de Soria y el resto residentes en la capital. Hicieron una preciosa reivindicación dentro del estadio con los móviles encendidos, dentro de la plataforma ‘¡Soria ya!’. Esta gente se merece unas infraestructuras acordes con el siglo que estamos. Que les pongan un tren que no tarde una eternidad y una autovía sin cortes. En suma, que tenga Soria tan buena pinta como su equipo de fútbol, que huele a ascenso a Primera. Si gana este domingo en Huesca sus opciones subirán como la espuma. Se lo merecen.

Síndrome Bernabéu. Jugar en casa se ha convertido en una tortura para el equipo de Zidane. De catorce encuentros este curso, sólo ha ganado la mitad. Ha empatado cinco: ¡ante Fuenlabrada y Numancia en Copa!, ante el Tottenham en la Champions y en Liga ante Levante y Valencia. Y han sufrido dos derrotas ligueras ante Betis (0-1) y Barça (0-3). El legendario miedo escénico se bate en retirada...

Preocupación. Me la trasladan vikingos ejemplares como Yohander Tamayo, Óscar de la peña de Salamanca y José Antonio Alvarez de Miranda de Ebro, que se ha jubilado. Y no me olvido de los que nos han dejado esta semana: Juan Antonio de la Fuente, de la peña Capote y Montera, y Juana de Arcos, que tras 61 años de unión ha dejado viudo a mi admirado Eugenio Escudero. Y va por Enrique, un madridista eterno y un hombre admirable.