Alemania usará dos árbitros de video tras la polémica con VAR
Este fin de semana se acusó al director del VAR de haber intervenido en la decisión del videoasistente durante el partido entre el Wolfsburgo y el Schalke.
La Federación Alemana de Fútbol (DFB) reaccionó a las críticas que recibió el uso del videoarbitraje (VAR) anunciado que a partir de ahora habrá dos jueces de video en cada partido de la Bundesliga y no uno como hasta ahora.
El nuevo jefe de la tecnología de video de la DFB, Lutz-Michael Fröhlich, señaló al diario "Bild" de este miércoles que un árbitro estará atento al partido y otro se encargará de revisar las jugadas polémicas.
Fröhlich añadió que las jugadas controvertidas tendrán que ser mostradas además en las pantallas gigantes de los estadios para que haya una mayor transparencia.
El VAR fue introducido esta temporada en la Liga alemana de fútbol. La tecnología ayudó en ciertos partidos, pero también generó mucha controversia, hasta tal punto que se rumoreó con su eliminación durante el receso de enero.
"Estoy convencido de que esto no ocurrirá. Ha habido problemas, pero no ha fracasado. Es el momento de que todos, árbitros, clubes, aficionados y medios, lo mejoremos", dijo Fröhlich, que asumió la dirección del sistema del VAR en la Bundesliga el lunes, después de que la DFB destituyera a su antecesor, Hellmut Krug, por las críticas.
En la última fecha de la Bundesliga se acusó a Krug de haber intervenido en la decisión del correspondiente videoasistente durante el partido del Wolfsburgo ante el Schalke en su función de director del VAR y supervisor del encuentro.
La discusión no es nueva. El estreno del VAR en la Liga alemana, a mediados de agosto, ya fue un tanto aparatoso. Mientras que en algunos partidos el desempeño del videoarbitraje fue correcto, en diversos estadios la técnica falló parcial o completamente en su debut.
No obstante, tras un intenso análisis, tanto la Liga como la Federación Alemana decidieron dar una segunda oportunidad al sistema. Desde entonces, el VAR continúa poniendo a prueba la templanza de los jugadores y la capacidad cardíaca de las aficiones.
Tanto en partidos de gran envergadura como en otros que enfrentan a equipos más modestos, lo cierto es que apenas hay una jornada de Liga en Alemania en la que el videoarbitraje no acabe convirtiéndose en noticia. Sus detractores abundan más que sus partidarios, pero aún así todos son conscientes de que, les guste o no, están condenados a entenderse.