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Yimmi Chará y la emoción de recordar sus inicios en el fútbol

"Lo que soy hoy, es el premio al esfuerzo y la dedicación que he tenido", expresó Chará en AS Colombia. Ortiz lo llevó al Tolima a hacer realidad su sueño. "Le vi una habilidad tremenda".

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Yimmi Chará y la emoción de recordar sus inicios en el fútbol
FCF

Desplazarse desde el barrio Floralia, hasta la sede de La Candela, es como pasar de un municipio a otro. Yimmi Chará se crió muy cerca de donde inicia Cali, por el Norte, más próximo a Yumbo; y el lugar donde entrenó el Boca Juniors durante muchos años, está próximo a Jamundí. El virtuoso atacante, de ruidosa contratación por parte del Junior de Barranquilla, recuerda sonriente sus eternos desplazamientos en la entonces empresa de buses urbano Papagayo.    

“Uno siempre recuerda los momentos buenos y malos. Me da alegría recordarlo, porque lo que soy hoy, es el premio al esfuerzo y la dedicación que he tenido. Siempre disfruté los momentos en Boca. Las competencias eran muy altas contra los rivales, y llena de alegría ver que muchos están en la profesional. Es lindo recordar los viajes en el Papagayo”, comentó Chará.

Contrario a sus hermanos Felipe y Diego, Yimmi eligió ser delantero, “porque son los que más cobran”, comentan que decía el habilidoso atacante en aquel entonces. Sin embargo, su máximo referente era un mediocampista creativo, Giovanni Hernández, jugador también brotado del Boca Juniors. “Nunca compartimos equipo, pero cuando llegué a la profesional, tuve la oportunidad de enfrentarlo”, recuerda Yimmi, al tiempo que agradece a sus hermanos, porque le brindaban la oportunidad de estar cerca a los consagrados jugadores de la época. “Aunque no tenía la posibilidad de hablar con ellos, veía su forma de actuar y eso también me sirvió para aprender. Observaba a ‘Champeta’ Velásquez, y a muchos amigos de mis hermanos que siempre fueron muy humildes”.

Y es justo la humildad y los valores adoptados de su familia, los que terminaron de convencer a Humberto Ortiz de vincularlo al Tolima, donde jugaba su hermano Diego, quien hizo la recomendación. Yimmi, pese a que estaba provisto de una depurada técnica, era mirado con incredulidad por parte del mandamás del Boca Juniors, Hernando Ángel Montaño.

“Me impresionó mucho que los padres siempre iban a ver jugar a sus hijos; es una familia futbolera y me llenó de admiración. Y cuando vi a Yimmi le noté una habilidad tremenda. El fútbol no tiene talla, tiene condiciones, y el chico era muy rápido, aguantaba el balón; lo veía como un jugador completo, con mucha lucha. Siempre fue protagonista. Entonces le dije a don Gabriel Camargo (propietario del Tolima), ‘nos vamos a traer a este muchacho’, y no resultó muy difícil llevarlo, porque a él no le creían mucho, por la talla; pero tenía un talento muy grande”, detalló ‘Tucho’ Ortiz a AS.  

Felipe (36 años) hoy juega con Rionegro Águilas. Diego (31 años) actúa con el Portland Timbers de la Liga de Fútbol de los Estados Unidos, y Yimmi (26 años) se está instalando en la cumbre y continúa a una velocidad de velero, y con el aplomo que distingue a los Chará Zamora.  

“Desde la casa, siempre nos inculcaron ser humildes, que no tiene nada que ver con ser pobre. La familia lo adoptó y los resultados se han logrado”, sostiene Yimmi, y ‘Tucho’ Ortiz añadió al respecto: “lo que más admiro de él es su señorío. Es muy humilde, callado, respetuoso, y luego, su habilidad y el remate. Es un goleador neto. Siempre ha sido goleador y sacrificado. Ponía su capacidad individual al servicio de su equipo, participaba en las fases defensivas y ofensivas. Es un jugador útil”.

Yimmi, también dio con agilidad el paso desde las categorías menores, al primer equipo del Deportes Tolima. “Lo hizo en cerca de seis meses; mientras que Darwin Quintero se demoró un año y medio en llegar a la profesional”, indicó Ortiz, y Chará reconoció: “Jorge Luis Bernal fue el que me dio la confianza para sumar minutos en cancha. Siempre me enseñó. Fue una persona que ayudó mucho a los jugadores jóvenes y estoy muy agradecido por eso”.

La convocatoria de Yimmi Chará a la selección absoluta de Colombia, fue casi que un clamor de los simpatizantes del balompié nacional. El atacante del Junior, ha anotado 9 goles en 10 partidos; y además de su eficaz finalización de las jugadas, demuestra su funcionalidad en cada compromiso. El ponderado jugador habló con AS Colombia.

Su acertada toma de decisiones: “Con el paso de los partidos, se logra el conocimiento y la serenidad para dar los pases. En cada juego, se va aprendiendo, por qué las situaciones se dan de esa manera. Además, luego de los partidos, miro los videos, la forma en la que me estoy parando en la cancha, cómo estoy ocupando los espacios… Y eso me ha ayudado mucho dentro del terreno de juego”.

Su valor, ya se multiplicó: “Siempre la gente va a hablar de cosas buenas y malas. Lo importante es ser muy profesional. Aunque las cosas no se den, lo que siempre uno debe aportar es profesionalismo y ganas, y pienso que hasta el momento he hecho las cosas bien en el equipo”.

Supongo que Fuad Char le quiere firmar un contrato vitalicio: “(Risas) Eso se lo va ganando uno, con lo que aporta cada semana. El respeto que me he ganado en el fútbol colombiano, ha sido por mi disciplina y compromiso”.

Volver a la Selección Colombia: “Siento alegría. Estar en la Selección Colombia es algo por lo que uno trabaja y se esfuerza. Uno de los motivos que me impulsó a regresar al fútbol colombiano, fue tener la posibilidad de sumar minutos. El nivel que se está mostrando es bueno y por suerte se tuvo la convocatoria”.

Venezuela: “Es un equipo joven, que viene demostrando cosas muy buenas, lo vimos en el pasado Mundial Sub-20, y frente a nosotros van a querer demostrar”.

El duelo con Neymar: “Tengo que esperar primero a ver si tenemos la posibilidad de jugar frente a Brasil”.

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