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El Barcelona se emborracha con nada

Umtiti. Si explicas que Umtiti fue el mejor jugador del Barcelona no sólo explicas la segunda parte del equipo de Luis Enrique: explicas el resultado y explicas que no es lo mismo predicar que dar trigo. Hubo dos escenas que me llamaron la atención en la primera parte. En la primera Iniesta le explicaba a Mascherano, ambos sufriendo en el banquillo, un lance del juego: no cómo sucedió, sino cómo debía haber sido. Cuando acabó la primera parte Piqué hizo lo mismo con André Gomes: se ve que el centrocampista portugués no entendió algo y el capitán en la sombra del Barcelona le hizo algunos juegos malabares para hacerlo de su parte del conocimiento. Umtiti, mientras, permanecía callado, trabajando. A lo suyo.

El fútbol explicado. El Barcelona es muy explicado en la banda, cuando acaban los partidos, cuando se interrumpen las jugadas. De resto, es un equipo en silencio viendo pasar las nubes. Don Luis Suárez Miramontes, el mayor ideólogo del equipo, se asustaba en su grada conectada a Carrusel Deportivo: ¿qué tal si se concentran, qué tal si se dejan de malabarismos y se sitúan para ganar un encuentro que se les puso cuesta arriba nada más empezar? Los jugadores traían las lecciones aprendidas de los entrenamientos, pero tan solo la solidez y el esfuerzo de Umtiti, algunos destellos de Leo Messi, el gol de Luis Suárez, la astucia intermitente del portero holandés Cillessen, y el resplandor de Iniesta, justificaron que el Barça pasara esta eliminatoria y se metiera en una nueva final de Copa.

La apelación al aficionado. Se sintió tan impotente este Barcelona diezmado, de ideas y de futbolistas, que tuvo que recurrir al orgullo de los colores y para eso dispuso de Piqué. Ya que los jugadores se dejaron las lecciones en las zonas marginales del terreno de juego, que entre la grada. Pero la apelación de Piqué al graderío animó… a la grada. Los futbolistas siguieron jugando como si estuvieran esperando sufrir más y la eliminatoria viniera decidida del partido de la semana pasada en el Vicente Calderón. Borrachera de nada. En Canarias aconsejan no buscar el conejo cuando se pierde la madriguera. El Barcelona perdió el conejo y la madriguera. Y el Atlético de Madrid, que fue superior en todo, no ganó la eliminatoria porque Umtiti es grande. Con eso queda todo dicho.