Borja antes de la fama: tres alegrías en su carrera deportiva
Desde 2013 hasta 2015 Miguel Ángel Borja no era tan conocido en el fútbol nacional. Pocos recuerdan su participación en un Mundial juvenil y el gol en El Monumental.
El nombre del goleador de Atlético Nacional tomó fuerza a en junio de 2016 cuando se proclamó como goleador de la Liga Águila con 19 goles, convirtiéndose en el máximo anotador de los torneos cortos en toda su historia; atrás quedaba la marca de Jackson Martínez en 2009 (18 anotaciones).
Después de eso solo le llegaron cosas buenas: ficha por Atlético Nacional, sale campeón de la Libertadores, disputa los Juegos Olímpicos, es convocado por José Pékerman a la mayores y ahora está a punto de irse al exterior por cifras millonarias.
Lo que pocos recuerdan es que esos logros deportivos no son los únicos de Borja en su carrera, antes había celebrado cosas grandes, así no hubiese terminado siendo protagonista como en 2016. A continuación sus tres momentos antes de la fama.
Campeón del Sudamericano y mundialista
El delantero hizo parte del plantel que salió campeón en Argentina 2013. El equipo del 'Piscis' Restrepo contaba con jugadores como Cristian Bonilla, Sebastián Pérez, Juan Fernando Quintero, entre otros. En ese torneo, Borja jugó 8 partidos y marcó 3 goles.
En el Mundial de la categoría, celebrado en Turquía, Miguel Ángel no fue titular pero ingresó en dos juegos. No pudo anotar.
Gol a River Plate
El 16 de noviembre de 2014, jugando para Olimpo de Bahía Blanca, Miguel Ángel Borja celebró una anotación en el histórico estadio Monumental de Núñez, casa de River Plate. El cordobés hizo el gol de empate a los 25 minutos de haber ingresado al campo de juego.
Campeón de la Copa Sudamericana
Pocos recuerdan el paso de Borja por Independiente Santa Fe en 2015. El jugador nunca se afianzó en el equipo bogotano, pero a pesar de eso consiguió marcar 10 goles en Liga (5 en cada semestre) y salir campeón continental. El club cardenal ha sido el único colombiano en levantar el trofeo de la Sudamericana.
