En taquilla apenas hay entradas...

Martes otoñal, con previsión de lluvias en la Comunidad de Madrid, rival de medio pelo (o calvo directamente), en la calle apenas se habla del partido... Todo parece frío y desangelado antes de la visita del desconocido Legia. Polonia es un país que temíamos futbolísticamente en los años 70 y que dio talentos como Tomaszewski, Deyna, Smolarek, Lato, más tarde Boniek... Ahora sólo queda Lewandowski (territorio Bayern). El actual Legia es un reducto de esas previas que la UEFA ha propiciado para globalizar la Champions, a sabiendas de que eso provoca la presencia de rivales sin el nivel exigible para esta competición única. Pero con todo eso, a última hora de la tarde sólo quedaban a la venta 244 entradas. Es la magia de Europa, el olor que impregna los aledaños del Bernabéu cuando le toca vestirse de largo cada vez que se cita con su amante favorita: la Copa de Europa. El Madrid llega hoy a su cita 400 con esa novia con la que ha contraído matrimonio... ¡11 veces!

El plan de Zidane es mantener la inercia triunfal del Villamarín. Hasta el derbi con el Atleti (19 de noviembre), hay un calendario generoso que impide permitirse un solo fallo: Legia, Athletic (el rival más duro hasta la cita del Calderón), Cultural Leonesa (en Copa), Alavés, Legia de nuevo (en Varsovia a puerta cerrada) y Leganés. Zizou tiene un su cuaderno escrita esta expresión: ‘Pleno al 6’. Con seis triunfos en esos partidos quedaría encauzada la clasificación de la Champions y seguramente permitiría recuperar el liderato de LaLiga. Esta noche toca fiesta en el Bernabéu. Y goleada.