La triste medalla de plata de la nadadora rusa Efimova Yulia
La bracista rusa salpicada por el escándolo de dopaje de su país, finalmente pudo participar al levantarse el veto, pero los nadadores siempre la han mirado con recelo.
Una mala salida y la irrupción de la estadounidense Lily King impidieron a Efimova llevarse el oro de Río, una situación que habría generado aún más contrariedad. La rusa finalizó la prueba nadando hasta la plata (1:05.50), lejos de una inaccesible King (1:04.93, récord olimpico), pero también nadando hasta la soledad, tanto en la piscina como después en la entrega de medallas, un vacío consensuado por la natación. Efimova se refugió en sus compatriotas y acabó con la bandera de su país y sonrieando, ayudada también porque los espectadores habían prácticamente abandonado el recinto ya que esa entrega de medallas fue la última de la noche.
El primer positivo de Efimova se detectó el 31 de octubre de 2014. Los análisis encontraron en la sangre una sustancia anabólica denominada Cellucor CLK. El producto también contiene la sustancia L-carnitina, que había utilizado durante varios años en su dieta diaria. A la nadadora se le sancionó 16 meses y le eliminaron el récord mundial de 50 braza obtenido en una prueba de la Copa del Mundo. La rusa alegó que tomó esas sustancias sin querer obtener mejora de rendimiento.
Después de ese capítulo, llegó el segundo positivo por meldonium, aunque cuando se produjo la Agencia Mundial Antidopaje aún no lo había incluido en la lista de sustancias dopantes. Por eso mismo, la nadadora pudo competir. Este punto y su residencia en Estados Unidos fue lo que posibilitó que, a última hora, pudiera competir en estos Juegos Olímpicos. Que para ella están siendo incómodos.