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América de Cali

Oreste Sangiovanni: "Lo que viene es un gran futuro para América"

El ya expresidente de los ‘escarlatas’ dialogó con AS Colombia. Le dio vitalidad a un equipo moribundo y fue vilipendiado por los hinchas al no haber logrado el ascenso
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CaliActualizado a
Oreste Sangiovanni: "Lo que viene es un gran futuro para América"
Héctor Fabio GruessoAs Colombia

Seguramente la epopeya de la Junta Directiva que lideró Oreste Sangiovanni será celebrada de forma extemporánea. “La deuda era cercana a los 27 mil millones de pesos y hoy debemos 200 millones, pero porque no encontramos a los acreedores, no tenemos a quién pagarle”, sostuvo Sangiovanni, quien además, se anotó la exclusión del equipo de la Lista Clinton. No obstante, fue insuficiente para los simpatizantes ‘escarlatas’ fastidiados por la no consecución del gran objetivo, el retorno a la primera categoría.

Era un riesgo cuando asumió la Presidencia, habida cuenta de los enormes pasivos económicos…

“Era una labor compleja. Cuando salí de la oficina del doctor Marck Samara (Oficina de Control de Activos Extranjeros, OFAC), y conocí que de los 3 millones de dólares que debían haber estado congelados por quienes estaban en el ejercicio directivo del América, solo había un poco más de un millón, camino hacia el aeropuerto llamé a Osberth Orozco (directivo del América) y le dije, ‘vaya pensando cómo se quiere suicidar’, porque ante la deuda que tenía América, de sanciones e intereses para poder ir al acuerdo de acreedores, el tema se nos ponía a mordiscos. Hubo momentos de confrontación espiritual, anímica y sicológica de todos los integrantes de las familias que estábamos ahí, pero por ese cariño, todos buscamos recetas para que el América hoy sea un empresa libre”.

Usted es imperturbable, ¿en qué momento quiso ‘tirar la toalla’?

“Nunca. En América siempre sembramos buenas semillas y sabía que las cosechas se iban a dar. Siempre la visión de la Junta Directiva fue hacia una causa. Lo que viene es un gran futuro para América”.

¿Qué tanto padeció su familia durante este tiempo?

“Las familias de todos los directivos en algún momento se han preocupado e invitado a la reflexión, porque era un tema que incluía tiempo, salud, economía. Siempre quisimos dibujar una sonrisa en cada miembro de la hinchada americana, pero la sonrisa llegará”.

¿Fue tolerante ante tanta drasticidad de la hinchada hacia usted?

“La hinchada piensa con el dolor, no tienen por qué conocer tantas cosas que ha vivido América; la hinchada lo que espera son los resultados. Si a Jesucristo le sucedieron tantas cosas, cómo no le puede pasar a un mortal insipiente como yo”.

¿Qué le generaba cuando la gente le señalaba que estar en la B era un negocio para el América?

“Para América sería muy conveniente estar en la A, por el aporte económico que puede producir la categoría, con siete u ocho mil millones de pesos en taquillas; pero las taquillas del América en la B son irrisorias, aunque en el 2014 tuvimos momentos pletóricos, cuando llevamos a las familias al estadio y hubo ingresos para pagar cuentas que tenía América; además, con los dineros que recaudamos de las transferencias de Duván Zapata, Yámilson Rivera y con lo que nos tocó poner, pagamos cuentas preliminares a la confirmación del acuerdo de acreedores. Ya con eso saldado, hay una persona que invirtió una cifra importante, que le compró a otro socio y se quedó con el manejo del club. Siendo una inversión propia, sabemos que la va a cuidar”.

¿Qué le augura a Tulio Gómez como máximo accionista?

“Parte de la receta que se gestó era que entraran al América personas con capacidad económica. Era difícil para Osberth, para José (Sangiovanni) y para mí, jalar el tema. Las sanciones de la Supersociedades se dieron por el no cumplimiento de la democratización, pero en ese momento, la Junta del América decidió que no se hiciera la capitalización. Debieron haber sacado a la venta 3,600.000 acciones y no se hizo. Luego corregimos situaciones, avanzamos, y el ingreso de inversionistas, sólo le va a producir beneficios al América. Seguiremos apoyando la labor de quienes tienen el control de la administración. Tulio es un hombre bien intencionado, que está enamorado del tema del América”.

Siempre avizoró terminar su periodo con el equipo en la A…

Sí, era parte del compromiso. América pudo haber ascendido en el 2012, de no haber sido por un error humano del árbitro que le anuló un gol a Julián Lalinde, lo que no sabemos es si hubiéramos podido mantenerlo en la categoría A. luego, trajimos a Diego Umaña por bueno, porque es un hombre brillante en el fútbol. Clasificó cinco fechas antes, fue primero en la Reclasificación, pero el fútbol le jugó una mala pasada y en las finales no pudo concretar el objetivo. Cuando ingresamos a los cuadrangulares finales, le pregunté a Diego, ‘qué piensas de corazón’, él me dijo, ‘no te preocupes que ascendemos’. Se ha seguido intentando y seguramente llegará como fruto de todo lo que se ha hecho, para que exista más armonía entre todos los miembros de la institución”.

¿Había cerrado su cuenta de twitter?

“No he tenido cuenta de twitter activa. No soy muy adicto a la tecnología. Ahora lo podré hacer porque ya tengo la tranquilidad y seré un hincha más. Siempre estaré positivo en esta gesta del América, esto no es una labor de un día. Oreste Sangiovanni pudo haberse quedado con el 70 u 80 por ciento del América, pero siempre la visión fue que tuviéramos doce apóstoles luchando por esto, porque en el futuro de América, cualquier dinero será poco. Si quieres ser millonario, metete al fútbol, pero tienes que entrar multimillonario para terminar siendo millonario”.

¿Con qué sentir deja la Presidencia del América?  

“Hemos sido causalistas y sé que por esas siembras sanas, transparentes y ortodoxas, vendrán efectos positivos. Quedan un par de contingencias que resolver, una es con la Dian, que se podrá cruzar con positivos que tiene el América a favor. Veo un futuro próspero para el América de Cali y será el fruto de lo bueno que se ha hecho, no lo perfecto”.