Sin plan B
Les fue mal a Santa Fe y Cali en su segunda salida en Copa Libertadores y oficiando como visitantes. Ambos están, transitoriamente, en el último lugar y con un solo punto. Santa Fe, durante unos sesenta minutos, aplicó la lección que más conoce. Defender y agrupar volantes para hacerle sudar la gota gorda a Corinthians. Pero tan pronto llegó el gol de Guillerme, la obligación de ir a pelear por el empate no la pudo cumplir, porque no parece preparado para organizar jugadas de ataque claro. Por más que terminó actuando con tres delanteros,quedó sin activar el plan B distinto.
Peor le ocurrió al Cali en La Paz. Muy a pesar de llevar en la excursión 12 jugadores formados en las divisiones menores, ofreció una imagen de impotencia total. Su defensa fue superada en el juego aéreo, sin que Lozano y Mera demostraran coordinación y solvencia. Con más costumbre de atacar, si se piensa en Preciado, Santos Borré y al final Casierra, Cali recibió castigo.
Algunos jugadores como Roa y Santos, con apatía y pereza, no dieron pie con bola. Y sabemos que Preciado depende de los volantes, porque es un definidor y si el balón no le llega, pasa desapercibido.
Muy temprano, a los 4 minutos ya estaba en desventaja, y sólo fue cuestión de minutos para que Bolívar fuera creciendo y llegando con excesivas facilidades al arco de Hernández, que evitó el que iba a ser el sexto gol. Marcador lapidario de cinco a cero. El Cali, sin sorpresa para jugar.
Volverán las historias de la altura que afectan a los jugadores que llegan al Hernando Siles. Eso se sabe, toman precauciones, y eso que la juventud de los jugadores verdiblancos ayudaría a contrarrestar los efectos. No fue así.
Hace unos cuantos años, este Bolívar contaba con un puntero izquierdo, Hirano, que era el rey de las alturas por su velocidad, gambeta y resistencia. El Cali permitió que Arce se convirtiera en goleador de la Copa, pues marcó tres goles y totalizó cuatro. Si Santa Fe no dispuso de un Plan B, el Cali directamente no tuvo plan...