Sacheri: Usuriaga se ganó el corazón de Independiente

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En la cancha Bochini. En las letras Sacheri. Una dupla de Independiente que desde la pelota y la literatura define el sentido del equipo más ganador de Copa Libertadores de América. Ya en el túnel de salida a la cancha, Ricardo “El Bocha”, emocionaba. Después dibujaba fútbol. Eduardo, el escritor, conmueve desde las páginas que evocan juego, sentimiento, tribuna. Eso es el rojo de Avellaneda.

¿Será siempre Independiente, el orgullo nacional?

“Yo creo que sí. Lo cantaremos el jueves. Estamos convencidos de que es así. Más allá de que como toda condición futbolera es una cuestión más de ser religioso que de comprobación empírica”, responde Sacheri en Buenos Aires ante el llamado de AS Colombia.

Encontró en el fútbol un refugio para superar la muerte de su padre cuando tenía 10 años. “Cuando muere mi viejo, un viejo muy querible, hay una explosión en ese hogar feliz y una fuerte amenaza de soledad para mí, que era el menor de tres hermanos con mucha diferencia de edad. Y lo que me salva es el fútbol, jugar con los pibes del barrio, socializar”, contó en una entrevista al Diario La Nación de Argentina en 2014.

En ese entorno que lo protegió, conoció al mejor Independiente. Ese de Ricardo Enrique Bochini con la 10 en la espalda. El de los años setenta y ochenta que llevó el juego a la máxima expresión de buen gusto.

“Este es un equipo con mucho prestigio, con mucha historia. Si bien en los últimos 20 años no ha tenido buenos momentos. De hecho hace dos años por primera vez en su historia se fue a segunda división y le costó bastante regresar. Acá en Argentina se le conoce como el Rey de Copas, precisamente por esa vieja gloria sobretodo vinculada con la Copa Libertadores. Teniendo en cuenta que es el único equipo que la ganó siete veces, pero claro, de la última de esas veces ya han pasado 30 años”, agrega.

Sobrevivió a un descenso con la escritura como terapia. Es famoso su cuento  "Los sueños que te tocan" publicado en la revista El Gráfico cuando el equipo perdió la categoría. Un relato que le saca drama al dolor de esa derrota. Así lo vivió la hinchada que asumió con entereza su último partido en primera.

¿Qué hace especial a la hinchada de Independiente?

“Un antiguo gusto por el buen fútbol, de aquellas épocas gloriosas, con una gran fidelidad en los últimos años y una gran paciencia para acompañar el equipo en estos años malos. Es habitual que vaya muchísima gente al estadio y este jueves va a pasar exactamente lo mismo, va a ir mucha gente a acompañarlo”.

Sus primeros cuentos se conocieron en la radio. El periodista Alejandro Apo les puso voz en 1996. Una época con recuerdos frescos de Albeiro Usuriaga divirtiéndose en Avellaneda. Rulos al aire, piernas largas, baile en los festejos. Goles. “El Palomo” en carne viva.

“Cualquier hincha de Independiente te va a hablar de Usuriaga porque en los primeros años noventa, “El Palomo” verdaderamente se ganó el corazón de los hinchas de Independiente; porque era no solo estupendo, rápido, elegante, también metía goles. Lo queríamos mucho”, evoca.

Hace cinco años, Independiente ganó la Copa Sudamericana. El sueño de la reconstrucción apenas si duró. En 2013 tocó fondo. El descenso se hizo inevitable. El sentimiento rojo salió en auxilio, con textos como los de Eduardo o el “Caramelos y Aspirinas” de Luciano Olivera a los que se aferraron para mantener la fe.

¿Por qué se da esa relación entre Independiente y la literatura?

Yo creo que precisamente esta combinación de glorias viejas y dificultades actuales ha generado que los hinchas de Independiente hayamos sacado a relucir lo más genuino de nuestro amor, entonces tanto en el texto de Luciano o en un cuento mío, lo que pasa es eso. La literatura es buen refugio cuando la realidad es menos esperanzadora que esos viejos recuerdos.

¿Cuál es el presente de Independiente que enfrenta a Santa Fe?

Es un equipo que está muy ordenado y jugando  bastante bien al fútbol. Creo que tiene mejor plantel que en 2010, pero creo también que hay muy buenos rivales por ahí dando vueltas, Independiente Santa Fe no es el más débil de esos rivales, nos va a costar mucho. Entre Santa Fe y River Plate está lo más difícil que le puede tocar a Independiente y eso hace más difícil esta Copa que aquella de 2010.

Palabra de Sacheri.