Debe colgar el teléfono inmediatamente si recibe una llamada que comience por estos tres números: podrían vaciar su cuenta

En los últimos meses, usuarios en Colombia y otros países han reportado un aumento de llamadas telefónicas con prefijos internacionales sospechosos. A primera vista, parecen números comunes, pero en realidad esconden estafas diseñadas para robar dinero de las cuentas bancarias. Expertos en ciberseguridad recomiendan actuar con rapidez: si la llamada comienza con ciertos códigos, lo mejor es colgar de inmediato.

Los delincuentes detrás de estas estafas utilizan técnicas avanzadas de suplantación de identidad y vishing (estafa por voz) para ganarse la confianza de la víctima. Incluso logran simular que llaman desde el banco o desde una entidad oficial. En cuestión de minutos, la persona engañada puede entregar datos sensibles como contraseñas, códigos de verificación o instalar aplicaciones que permiten a los criminales tomar control de sus dispositivos.

Uno de los métodos más comunes es generar llamadas perdidas con prefijos internacionales. Al devolver la llamada, el usuario queda expuesto a tarifas elevadas que generan cargos exagerados en la factura telefónica. En algunos casos, los estafadores además aprovechan para interactuar directamente y manipular a la víctima.

Ojo con estos prefijos: son los más peligrosos

Entre los prefijos que más alertas han generado se encuentran los de Albania (+355), Costa de Marfil (+225), Ghana (+233) y Nigeria (+234). También hay reportes desde el Caribe, especialmente con números que comienzan en 809, 284 y 876, que suelen aparecer como llamadas locales pero en realidad son internacionales y con costos muy altos. La recomendación de las autoridades es nunca devolver llamadas de este tipo.

Aunque contestar la llamada no siempre implica una pérdida inmediata de dinero, el verdadero peligro comienza cuando la persona sigue las instrucciones de los delincuentes: dar clic en enlaces, instalar aplicaciones externas o compartir información bancaria. En ese momento, los estafadores logran acceder a los datos financieros y pueden vaciar cuentas en cuestión de horas.

A esto se suma la práctica conocida como spoofing, que falsifica el número que aparece en la pantalla. De esta manera, el teléfono muestra que la llamada proviene del banco, una empresa reconocida o incluso un contacto conocido, cuando en realidad es un fraude. Esta modalidad es cada vez más difícil de detectar y se ha expandido a nivel global.

Para protegerse, los expertos en seguridad recomiendan nunca entregar contraseñas, códigos de verificación ni datos bancarios por teléfono, desconfiar de cualquier llamada que genere sensación de urgencia y tener cuidado con las palabras o frases que digan a través de las llamadas.

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