Yerry Mina y su recuerdo 10 años después de ganar la Copa Sudamericana
El central habló con AS Colombia desde Italia y aseguró que, ese título es un momento que “sigue llenando el corazón”.


El 9 de diciembre es una fecha especial para Santa Fe, en 2015 el club se consagró campeón de la Copa Sudamericana y entre los héroes de esa gesta estuvo Yerry Mina, el central fue pilar de una defensa sólida y potenciada por Gerardo Pelusso, el técnico que le enseñó “la empanadita” al defensor y que una década después le ha servido para seguir en la élite jugando en una de las ligas top de Europa.
A más de 9 mil kilómetros de distancia, Yerry le contó a AS Colombia lo que significa para él haber pertenecido a este equipo que se consagró campeón. Un equipo que se volvió familia y logró la gloria continental al lado de una hinchada que nunca abandonó.
“Los 10 años de la Sudamericana los recuerdo con mucha alegría, fue un torneo que nos unió como familia, como equipo. Había esfuerzo, ilusión, noches de oración y una hinchada que nos empujaba siempre. Sencillamente gracias a Dios por permitirme vivir ese momento que sigue llenando el corazón de los hinchas, mi familia, mi corazón”, afirmó Yerry.
Mina y el valor de Pelusso para su carrera
Yerry jugó 11 de los 12 partidos que disputó Santa Fe para quedarse con el título. El defensor aseguró que, Pelusso ha sido uno de los mejores técnico que ha tenido en su carrera y el método de “la empanadita” sirvió para que hoy siga sacándole provecho en las canchas de Italia.
“Para mí, la famosa empanadita de Pelusso es una manera muy simple y clara de explicar la zona del área. Basta decir que para mí ha sido uno de los entrenadores más importantes que he tenido en mi carrera. Por esa manera de explicar y defender me permitió experimentar este método en cada uno de los equipos en los que he estado y gracias a Dios me ayudó a entender el juego de forma práctica, anticipar y ser solidario con el compañero”, dijo Mina.

Y agregó que. “A veces las ideas más grandes se explican con palabras sencillas y es algo que tiene este entrenador. Con pequeñas frases te hacía ver las ideas y minimizar el riesgo. Estoy muy agradecido con el profe por esa enseñanza que me dio para mi carrera y gracias a Dios que nos dio la sabiduría en lo pequeño para ponerlo cada día en el campo de juego.
Finalmente, también contó lo que le dejaron los técnicos que lo dirigieron durante su paso por el club bogotano, en el que disputó 123 partidos, marcó 12 goles y ganó 2 títulos.
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“Con Costas, aprendí disciplina y orden; de Pelusso, para mí fue uno de los mejores, claridad para comunicar y enseñarme; de Wilson aprendí cercanía y confianza; de Alexis intensidad y modernidad en su trabajo. A todos les agradezco porque cada uno aportó algo especial a mi carrera", concluyó.
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