Reinaldo Rueda, del dolor de no ir al Mundial a su relación con James

“Me duele el corazón todavía”. Reinaldo Rueda describe de esta manera la tristeza por no haber logrado el objetivo de llevar a la Selección Colombia al Mundial de Qatar 2022. Así lo expresó en el programa Olfato de Gol con Tomy Arguelles, en el que habló del presente del fútbol hondureño, que podría ser rival de la Tricolor en la Copa América si deja en el camino a Costa Rica, y de su reciente etapa por nuestro país.

“Fue algo inédito, nunca me había sucedido en mis 40 años de entrenador. Me duele el corazón todavía. No esperé que me fuera a pasar pero me pasó y es una de esas lecciones duras del fútbol. Si se revisan las métricas fuimos de las selecciones que más balones recuperaba en zona rival y las llegadas en los primeros minutos con gran colectividad, pero falta de eficacia. El equipo se fue llenando de ansiedad (...) Todos querían marcar, pero no se dio. Decisiones del VAR que nos afectaron. Arqueros que fueron figuras como Gallese y Domínguez. Goles anulados en instancias importantes. Una cantidad de cosas en 6 o 7 partidos increíbles. Hacia falta que me pasara para seguir respetando más el fútbol”, dijo el entrenador sobre no conseguir la clasificación.

Ese sueño de ir a una Copa del Mundo lo cumplió con otras selecciones: “Es un golpe psicológico muy fuerte. La ilusión de uno como entrenador es llegar a la Selección, las dos veces llegué por méritos y porque me lo solicitaron, nadie me ayudó por influencias. En 2004 veníamos de hacer un excelente trabajo en selecciones juveniles. Nos quedamos por un punto fuera del Mundial de Alemania y fue un golpe duro. Y esta última teníamos una nómina de lujo y no lo logramos. Es de las lecciones duras del fútbol, golpea demasiado por lo que significa brindarle alegría a la gente. Nadie es profeta en su tierra. Jugadores de Honduras y Ecuador nos brindaron la satisfacción profesional de clasificarnos a un Mundial. Los golpes fuertes enseñan y fortalecen. Estamos haciendo el camino para otro sueño”.

La decisión de no llamar a James y el presente de la Selección

Rueda decidió en un pasaje no tener en cuenta a James Rodríguez para la Selección, ya que no tenía continuidad y padecía algunas lesiones. Una determinación cuestionada por un sector y respaldada por otro. Pero el DT tiene claro que lo hizo por cuidar a un futbolista al cual admira.

“Todo pasa por el momento del jugador. Como le dije a James, yo no quería abusar de él ni usarlo. Se lo dije: ‘Prefiero que dejes de jugar 5 partidos, pero que juegues 5 años más para la Selección. Prefiero que hagas vacaciones, una limpieza mental, que se recupere ese músculo. No quiero usarte en tres partidos y no poder hacerlo en dos y más para la Copa América, partidos seguidos, viajes largos’. Él venía de una lesión, no llegó en el momento ideal. Había sufrido mucho y quise que tuviera sus vacaciones, que hiciera un buen acondicionamiento y una pretemporada completa y para eso hay que hacer vacaciones ideales. Si no hay descanso, llegan cansados a la pretemporada. Cuando jugó 5 o 6 partidos con Al Rayyan, sufriendo por el estilo de fútbol y las temperaturas, lo invité a volver, lo pensó, volvió e hizo todo lo que pudo para recuperar su nivel, que no era fácil. Un excelente ser humano, un gran profesional, competitivo, exigente con él mismo, gran líder, se hace querer. Ojalá que dure para muchos años por el bien del fútbol colombiano”, comentó.

Su reto era recuperar confianza en casa: “Colombia había perdido 3-0 contra Uruguay en Barranquilla y 6-1 contra Ecuador en Quito, eso precipitó la salida de Queiroz. Veníamos con una deuda y necesitábamos recuperar la confianza en calidad de local. Cuando se perdona como local en las Clasificatorias Sudamericanas es muy duró, más que ha sido una fortaleza de Colombia. Ese entrenamiento mental es de tiempo, lo da el fútbol, hacer goles. Cuando uno se pone obsesivo es cuando más se bloquea el jugador en partidos de alto estrés. Cuando el jugador tiene tranquilidad y fluidez hace goles. En partidos amistosos, muy bonito todo; pero cuando las papas calientan es otra situación”.

El presente de la Selección: “Positivo lo que ha venido haciendo Colombia por la gran capacidad del profesor Lorenzo y el conocimiento que adquirió en esos ocho años con Pékerman. Un gran trabajo, buenos juegos, buen comportamiento de Colombia. Hay mucho para crecer con jugadores que se van consolidando con sus clubes de la generación que viene como el caso de Jhon Lucumí, Carlos Cuesta, Daniel Muñoz, Campuzano, el mismo Carrascal, Yaser Asprilla. Un gran potencial que tiene Colombia junto a los hombres grandes que venían en el camino. Ha realizado juegos inteligentes”.

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