MILLONARIOS

Cataño sobre Millos: “Es uno de los camerinos más sanos”

El volante habló con ‘Millonarios Inside’ y destacó el buen ambiente en el interior del equipo azul. Mencionó la importancia del título ante Nacional y elogió a Alberto Gamero.

“Millonarios es Millonarios”, comentó Daniel Cataño en el inicio de su entrevista con ‘Millonarios Inside’, el videocast del conjunto azul. El volante, quien fue pieza fundamental en el título de Liga ante Atlético Nacional, se mostró feliz con su presente deportivo y fue enfático en que su vida ha sido “una montaña rusa” en los últimos años.

Pese a su difícil salida del Deportes Tolima, Cataño logró adaptarse rápidamente al estilo de juego del equipo dirigido por Alberto Gamero y terminó ganándose, en poco tiempo, un lugar fijo en la alineación titular. Con el regreso de Daniel Ruíz ha conformado junto a David Mackalister Silva uno de los mejores mediocampos del país. “Los hinchas se sienten identificados conmigo y yo con ellos”, comentó.

Además, el 10 del vigente campeón del fútbol colombiano contó que Macnelly Torres ha sido uno de sus grandes referentes en su carrera. “En el último tiempo, yo soy muy malo para pedir camisetas, pero al único que le quería pedir fue a Macnelly, me tocó hacer el puente con un amigo que tenía en Cali”, añadió.

El título ante Nacional y el incidente con el hincha en Ibagué

Títulos con Millonarios: “Millonarios es Millonarios, es un equipo grande y todo lo que uno hace tiene mayor relevancia que si lo hiciera en otros equipos. Esa esa la diferencia, tiene un boom mas grande a nivel nacional”.

La camiseta 10: “Importante, porque es un número que siempre me ha representado, representa en la posición en la que juego. El número le da ese toque a mi juego y es importante, cuando Dani Ruiz se fue para Brasil y hablamos, Dani me dijo, ‘es que ese número es para usted’. Tomé la decisión de cogerlo como ya lo había hecho en otros equipos, pero esta 10 tiene mucha historia y no es fácil llevarla. Me empecé a identificar con el hincha y el hincha conmigo”.

Su llegada a Millonarios: “Mi vida ha sido una montaña rusa, en dos años, pasaron cosas muy opuestas a lo que estoy viviendo en Millonarios. Venía de un año donde tuve turbulencias después de lo de Ibagué con el penal errado. Y llegar a Millonarios, tener otra idea, ver el fútbol con ganas, sin desilusión. Me tocó empezar a ganarme las cosas, mi puesto, mi posición. No fue fácil, llegar acá siendo paisa, donde se había tenido una final contra Tolima. Los primeros meses me tocó aguantar, entrar por raticos. Empecé a tomar forma, conocer al grupo y la institución me recibió muy bien y empecé a vivir cosas muy bonitas. Comenzó todo con el título de Copa, se minimizó mucho, pero internamente todos los clubes quieren ganarla porque es un as bajo la manga. Para mi también fue importante llegar y eso fue muy vacano. Luego la Liga, luego Selección Colombia que siempre soñé con esas posibilidades, eso te marca”.

Historia con el papá en el título: “Él no vio los penales, no fue capaz. Se puso nervioso. Mi hermano se fue con él, no pudieron ver los penales. Se fueron al segundo piso y mi papá se arrodilló y mi hermano le tomó una foto y se la mandó a mi mamá que tampoco fue porque ellos vivieron todo lo de Ibagué. Pero después en la celebración cuando pasaron los goles en la pantalla gigante, ahí si los vio”.

Incidente con el hincha en Ibagué: “He estado en equipos como Pasto, Bucaramanga, Leones, Medellín y nunca había salido mal de un equipo. El en DIM no jugué mucho pero luego tuve la oportunidad de jugar y no seguí por cosas de directivos. En Tolima me lesioné varias veces, pero siempre tuve buena conexión con la gente, así fuera titular o suplente y conseguimos muchas cosas, entonces fue muy triste porque eso no puede pasar en el fútbol, los violentos se tienen que erradicar del fútbol. Hablamos de la violencia y se tienen que erradicar del fútbol totalmente. Además, porque yo sabía que mi familia lo estaba viendo. Yo no pienso en lo que me puede pasar a mi, pero a ellos les cuesta un poco mas y ellos no hacen parte de esto. Mi esposa abandonó su carrera por estar conmigo, mis papás tienen el plan de sentarse a ver los partidos míos. Eso se pudo haber evitado de muchas partes. Hay cosas que hacen parte del fútbol como la jocosidad, la pasión, pero ahí me sentí triste”.

Reacción de sus compañeros y de Millonarios: “Ese día fue especial. Uno a veces se queja o le parece difícil lo que vive, y a las personas que están pasando por un mal momento espero que esto les llegue al corazón, cuando vivimos situaciones difíciles es porque viene algo mas grande a nosotros, pero nosotros en nuestra humanidad no lo entendemos. A mi me daba tristeza pero ese día el grupo me respladó. Llinás, el Mono llegó y dijo, ‘pueden hacer lo que quieran yo no voy a jugar’, luego Macka, tambien. Luego entramos al camerino, y decían, ‘es que tocaron a uno de nosotros y eso fue... El profe, Álvaro, todos. Luego todo ese lío que se formó con Dimayor, los clubes y yo le agradezco a Camacho y Serpa porque pusieron a disposición mía todo para apoyarme en los líos jurídicos”.

Lo que pasó en el bus: “Tiran una piedra al bus que le cae a Vargas y la gente hace videos mostrando la espalda de Vargas, y yo dije, “no le paren bolas a eso porque este año vamos a quedar campeones en el nombre de Jesús’ y todos ‘sí, así se habla’, todos con la algarabía y yo no me acordaba de eso. Y en Argentina, antes de Defensa y Justicia, Jorge Arias se acordó de eso. Fue muy especial porque se conformó una familia”.

Su día a día en Millonarios y la buena relación con sus compañeros

¿Qué son los quesudos?: “Fue una vez que con mi esposa que nos sentamos y a ella le tocó dejar todo en su momento y ella se sentía sola y yo viajando. Me dijo, ‘hagamos algo’ y nos pusimos a mirar algo que no había en Ibagué y en Medellín nos gustó un tipo de hamburguesa que se llaman los quesudos. Dijimos ‘hagámoslo una vez, mandemos a montar un negocio’, y conseguimos todo y montamos el negocio en Ibagué y vendíamos hamburguesa y picadas y con eso todo muy bien, aprendimos mucho con el negocio, era la primera vez que emprendíamos y no quedó para el futuro. No fue fácil porque luego entró la pandemia cuando ya nos conocían y fue muy difícil. Estuvimos en el festival de la hamburguesa, nos inscribimos y ganamos, vendimos como 3200 hamburguesas ese fin de semana. Cuando estuve lesionado, yo estuve pendiente de eso y aprendimos mucho. Con Vargas y Larry que estuvieron en Ibagué conmigo quedamos de hacer los quesudos y volver a probarlos”.

Compañero de cuarto: “Arias, es un buen tipo, buen compañero. Yo no soy desordenado pero él nos desembala cuando algo nos falta, siempre lo tiene”.

Esconder las maletas: “Esos manes son muy sentidos, se les embolata la maleta en el aeropuerto y me echan la culpa a mi”-

Maña de Mackalister: “Macka es el casino andante del equipo. Todos los juegos los tiene Macka. Se juega mucho carta, combito de parqués, todos apuestan duro, no puedo decir cuanto pero sí. Ellos jugaban hasta póker. Me han contado que hasta tenían mesa esos berracos. Pero Macka juega todo. Donde hay juego, ahí está Macka. A veces a uno le falta eso”.

Apodos: “A mi me dicen de todo. Dizque Nea, Chirrete, Cata, dependiendo la confianza de cada uno y la cercanía, pero yo no sé por qué me dicen así”.

Parceros en el equipo: “Siempre hay alguno con el que uno la pega mejor. Pero yo tengo muchos, Vargas, nos gustan cosas parecidas como la ropa, las gorras, los zapatos. Con Vargas tengo mucha afinidad porque vestimos diferente al resto. Además, con Vargas yo ya había compartido en Tolima. Habíamos viajado con nuestras esposas, también con Larry. Con Leo también me la llevo bien, había jugado en Medellín con él. Con Pereira tenemos una excelente relación, jodemos en todos los entrenos, creamos esa afinidad y en general tenemos buen camerino. Es uno de los camerinos mas sanos en los que he estado”.

La importancia de Alberto Gamero y la unión del grupo

Gamero: “Tiene muy buen manejo de grupo. No es regañón, las veces que él ha tenido que decirle las cosas a uno, él tiene maneras muy particulares y las tomamos a veces jocosamente. A veces me dice, ‘ojo que usted es un fosforito en la cancha’ y yo no peleo con nadie. Cuando regaña a Makca, entonces uno le sale con otra, pero el sabe manejar muy bien todo”.

Referentes de su carrera: “Uno de los jugadores que yo mas he admirado es Macnelly Torres. Hace muchos años me gustaba mucho Neider Morantes. En el último tiempo, yo soy muy malo para pedir camisetas, pero al único que le quería pedir fue a Macnelly, me tocó hacer el puente con un amigo que tenía en Cali. Pero Mayer, el Chico Restrepo, Omar Pérez, David Montoya. Internacionalmente es Martín Palermo y no tiene nada que ver ni con mi posición ni nada. También me gustaba mucho Guti, el del Real Madrid”.

La oración: “Cuando Daniel Giraldo llega al club, nosotros hemos tenido pastores que nos acompañan, nos reúnen en una habitación y nos comparten la Palabra de Dios. Y nosotros queríamos hacerlo esta vez con Giraldo. La Biblia nos enseña que somos la sal y la luz del mundo y empezamos con 8 o 9 personas. Antes de cada partido nos reunimos en mi habitación, pero era un espacio muy pequeño. Ahí empezamos y luego llegamos a estar todos, menos uno. Somos 20 concentrados y de 20, 19 iban, uno no. Y la gente empezó a creer. Yo compartía, preparaba mis temas, orábamos. Mi pastor me enseñaba, me daba palabras y a veces lo hacíamos por medio de diapositivas. Contamos con algo muy bonito que fue el apoyo del profe. Mucha gente le da el mérito de triunfos a esto. Algunos profes también iban. Si a mi me preguntan cuál fue el artífice para ganar el título, yo digo que fue Dios”.

Clave de Millonarios: “Todo lo que he vivido acá me gusta, me he enamorado de la gente, del club. Nadie sabe, pero cuando se acercaba el tema de la renovación yo tenía ofertas de otros equipos. Nosotros renovamos con 3 o 4 meses de anticipación por ser agradecidos con Millonarios. De alguna forma quería retribuirle eso al equipo que me aceptó y que me dejó estar acá. A mi hija le gusta ir al estadio, a mi esposa igual y acá nos hemos sentido bien, queridos, llenos. Es imposible no enamorarse de la gente, eso a mi me ha dejado impactado porque a Bogotá venía muy poco, soy paisa y cuando vengo a Millonarios y empiezo a ver la cantidad de gente que tiene Millonarios, es impresionante”.

La hinchada en Tunja: “Ese día fue impresionante, es de los mejores días en un estadio. Cuando fuimos a Chicago también, la cantidad de gente que Millonarios atrae es impresionante”.

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