Zidane, los detalles olvidados de su golazos
Se cumplen 30 años del primer gol de Zidane y desde entonces hasta el último todos rezuman belleza. Pasen y disfruten con ‘El Esteta del gol’.
El nombre de Zinedine Zidane comenzó a retumbar en los titulares de la prensa deportiva hace hoy 30 años. El joven atacante del Cannes (contaba con 18 años) acababa de lograr su primer gol como jugador de Primera División: había recibido un pase de su compañero Durix, se plantó delante del meta del Nantes, David Marraud, y le superó con una suave vaselina. Lucía el dorsal ‘9’, el que suelen llevar los delanteros centro. Ese gol suponía una doble felicidad: al debut goleador en su carrera en Primera División se le sumaba un regalo. Un obsequio del presidente del club mediterráneo, entonces Alain Pedretti, que le había prometido: un coche. Un Renault Clio de color rojo brillante, con el que poder moverse por la ciudad francesa.
Hay en esa jugada, en esa acción, un compendio de muchas de sus cualidades futbolísticas: sencillez, elegancia, técnica, talento, creatividad, precisión… Pero repasando sus goles en sus equipos (Cannes, Girondins, Juventus, Real Madrid y los logrados con la selección francesa), hay un denominador común en todos ellos que sobresale: la plasticidad de sus movimientos en el momento previo. Esos detalles convierten la mayoría de sus tantos en cuadros eternos en la retina de los aficionados al fútbol. Si a Cruyff le apodaron ‘El Profeta del Gol’, el Zidane jugador puede ser definido como ‘El Esteta del Gol’.
Hoy se cumplen 30 años de su primer gol. En AS hemos recopilado algunos de sus mejores tantos a lo largo de su carrera: desde la suave vaselina a Marraud, el primero de sus 156 goles, al último, un Panenka perfecto a Buffon en la final del Mundial de 2006 pasando por su inolvidable volea al Bayer Leverkusen en 2002, o sus jugadas personales ante Noruega en 1998 y la Reggina en la campaña 1999-2000. Pasen, vean y disfruten con ‘El Esteta del gol’.