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MEDELLÍN

Bolillo Gómez y un pasado en el DIM que invita a creer

El técnico paisa regresa al banco del Poderoso con el propósito de replicar la gestión que realizó en 2012 y que sacó al equipo de un momento crítico.

MedellínActualizado a
Bolillo Gómez y un pasado en el DIM que invita a creer

Independiente Medellín replicó la fórmula que utilizó hace siete años. Eligió a Hernán Darío Gómez como entrenador para superar un ciclo complejo y tras probar con tres técnicos en 2020. Hay fe en lo que pueda conseguir por sus antecedentes y el vínculo que mantiene con el equipo, en el que incluso tuvo ciclo como jugador entre 1975 y 1980.

Esa nueva oportunidad en el fútbol, que se dio luego de su polémica salida de la Selección Colombia acosado por el escándalo que generó al agredir a una mujer, la vivió con intensidad.

"No tengo palabras para decir lo que representa este reto", expresó el entrenador, que en ese entonces firmó contrato por dos años. "Tuve muchas posibilidades de dirigir, pero ninguna me llenó como la del Medellín", agregó el antioqueño, presentado el 3 de febrero de 2012 en un hotel.

En su primer ciclo como DT se enfrentó a un panorama más complejo. Incluso estuvo a un paso de renunciar con apenas seis meses en el cargo por la negativa del entonces presidente Jorge Osorio Ciro a reforzar la plantilla. Un relevo en la dirigencia le dio entrada a un periodo esperanzador bajo la guía de Julio Roberto Gómez, quien le trajo 15 jugadores, entre ellos a Germán Ezequiel Cano, Diego Herner, Leandro Castellanos y Jhon Viáfara.

DIM, con un equipo de obreros, llegó a la final

Con un equipo de obreros, como el mismo 'Bolillo' lo definió, logró una campaña más que decorosa al llegar a la final de la Liga II-2012. Y es que después de haber tocado las puertas del descenso en la era de Guillermo Berrío y de soportar la salida de 'Choronta' Restrepo y Bréiner Castillo por la falta de pago, el Rojo de la Montaña estuvo muy cerca de la estrella, que finalmente consiguió Millonarios con un 5-4 en una vibrante definición por penales.

Esa campaña con "papa y yuca", que además le dio a Cano su primer Botín de Oro en el fútbol colombiano, marcó la recuperación deportiva y económica del equipo, que –como sucede actualmente– estaba en proceso de venta.

El 2013, el año del centenario, no fue lo que esperaba. Y pese a que pidió a Giovanny Hernández como un regalo en los 100 años, el DIM no tuvo la mejor respuesta, pese a contar con jugadores que mayor calidad y al trabajo que había adelantado en los meses atrás.

Un adiós sorpresivo

Además del 'Príncipe', al que no le fue nada bien en segunda etapa con el Poderoso, al equipo de Gómez llegaron Cléider Alzate, Marco Pérez, Efraín Viáfara, Cristian Restrepo, Rafael Pérez, John Hernández, Dairon Mosquera y Ayron del Valle. De nada sirvieron esos refuerzos. Lo más resultados precipitaron la caída, pese al esfuerzo del entrenador. El bajo rendimiento de varios jugadores lo condenó y puso a Medellín en zona de descenso, nuevamente.

Después de 14 meses y de jugar la final de la Liga II-2012 con una nómina corta, 'Bolillo' terminó su historia, hasta ese momento, con el Poderoso. Se marchó el 19 de abril junto a sus asistentes Édgar 'Pánzer' Carvajal y Nelson Gallego y el preparador físico Elkin Sánchez.

"Fue muy dura y triste la conversación con Hernán, porque es un hombre que apreciamos y un buen técnico. Él se fue muy triste", contó el presidente Sergio Betancur, quien llegó en 2013 al club.

Gómez dirigió en total 52 partido oficiales, de los cuales ganó 16, empató 15 y perdió 21. Consiguió rendimiento del 40,3 %. Posterior a su desvinculación, regresó a su trabajo con seleccionados. Consiguió una histórica clasificación con Panamá y tuvo un paso fugaz por Ecuador para ahora regresar al FPC con Medellín, al que espera inyectarle fútbol, orden y sacrifico, como lo hizo hace siete años.