Nelson Olveira y el clásico bogotano a puerta cerrada de 2005
15 años después del clásico que se jugó a puerta cerrada entre Santa Fe y Millonarios, el exdefensor recordó su gol para sellar la victoria.
En 2005 la violencia entre barras obligó a que el clásico 241 por liga entre Santa Fe y Millonarios se jugara a puerta cerrada, un hecho histórico en la capital del país que tuvo que verlo por TV ese sábado 1 de octubre. La victoria fue para los cardenales 1-3 que oficiaron de visitantes y el último gol lo marcó el uruguayo Nelson Olveira, que después de tanto tiempo aseguró que, "la intensidad y concentración" de cada jugador, será fundamental para imponerse en un clásico sin gente como el de este fin de semana.
"Partido especial", "no importa la posición en la tabla", "se juega por más que los puntos", todas esas frases previas a un clásico y que como dijo Olveira, al momento de pisar la cancha y jugar ya no influyen en nada, pues es un partido que se espera durante todo el semestre y en el que solo vale ganar. 15 años después y ahora como entrenador, el exdefensor que se fue de Santa Fe con cuatro goles habló con AS Colombia respecto a ese partido y el del próximo domingo.
Clásico 241: Millonarios vs. Santa Fe, sin público 2005
Un partido hasta ese entonces inédito que tenía a Santa Fe en el puesto 16 de la tabla y con cinco puntos menos que Millonarios, realidad distinta comparada con el presente. Los goles del equipo dirigido por Basílico González fueron de Luis Yanes, Jairo Suárez y cerró de penalti Nelson Olveira; el descuento para los de Pecoso lo marcó Harry Castillo. Así vivió ese clásico el uruguayo que dejó huella en Santa Fe por su jerarquía y carácter.
La semana previa: "Ya sabíamos que íbamos a jugar sin hinchada, sabíamos que jugábamos el partido de la capital y teníamos que ganarlo".
¿Qué fue lo más extraño de ese clásico?: "La soledad de no haber gente en el estadio, porque el jugador cuando sale a jugar los partidos importantes mira a la tribuna".
Sin gente, ¿hizo falta motivación?: "A nosotros no nos faltó motivación porque ganamos 3-1. No se pierde intensidad, porque cuando se juegan esa clase de partidos, la intensidad y la concentración la da el jugador".
El jugador importa más que el aliento: "El tema de la gente es relativo porque están lejos de la cancha, se escucha el aliento continuamente, pero el valor se lo da el jugador. Más en estos partidos importantes. Todos teníamos que estar pendientes, atentos a no cometer errores, en un partido sin público los errores se notan más".
Mensaje para Torijano y Palacios: "Deben jugar seguro y simple. No demostrar nada distinto a lo que se ha hecho en los entrenamientos y también conocer sus limitaciones, de ahí en adelante va a irse corrigiendo y se harán mejor las cosas".