Jhon César Neita es el líder investigador de la colección entomológica del Instituto y explica, "las hembras de esta especie, como parte de su ciclo reproductivo, (historia natural de la especies) requieren una hibernación, la cual se lleva a cabo durante la época de invierno (bajas temperaturas, punto de congelación) y ante la ausencia de este ciclo, la biología de la especie se ve afectada y, por tanto, la capacidad de adaptación es nula, por consiguiente la especie sucumbiría", dijo.
Neita agregó que, a pesar del tamaño del insecto, no hay que alarmarse, pues en Colombia viven especies más peligrosas, "por ejemplo, en Colombia y la región tropical de América viven algunos de los insectos récord por tamaño. Tal es el caso de la hormiga más grande Paraponera clavata (Fabricius, 1775) (Hymenoptera: Formicidae) conocida como conga, bala o tocantera; la mosca más grande del género Pantophthalmus (Diptera: Pantophthalmidae) que sus larvas se alimentan de madera y los escarabajos más robustos de las familias Melolonthidae y Cerambycidae (Coleoptera)".