No lució devastado con el 4-1 que Junior les propinó. Octavio Zambrano hizo una radiografía de la presentación de Medellín en Barranquilla, pero luego se concentró en enviar mensajes positivos a sus jugadores al enfatizar en la posibilidad de una remontada en el Atanasio Girardot con un contundente: “Tenemos que salir a arrasarlos”.
Para el técnico, que admitió que a algunos jugadores los traicionó la falta de experiencia y cometieron errores, no es descabellado pensar en darle vuelta a una serie que parece definida. Y cree que si consiguen un gol en los primeros 15 minutos, la séptima estrella sería factible.
Así habló del primer juego de la final de la Liga II-2018 y de lo que será la vuelta ante Junior, ahora el primer opcionado al título:
Análisis: “No creo que sea una posición difícil de revertir. No esperábamos un resultado tan abultado. Tuvimos errores, aunque el rival también tuvo mérito. Ahora, nos toca ir a Medellín a remontar (…) Junior es un gran equipo, tiene individualidades que marcan la diferencia, pero nosotros mismos fuimos nuestro peor enemigo. No convertimos un par de opciones en el primer tiempo y cometimos dos errores que no son de este tipo de partidos. Pero conociendo a este equipo, no dudo que mis jugadores puedan remontar”.
La vuelta: “Tenemos que salir a arrasarlos en Medellín. Hay que salir con todo lo que tenemos y más. Tenemos que hacer un gol en los primeros 15 minutos. Eso nivela las cosas porque un 2-0 es remontable en cualquier momento. Hay que asegurarnos de hacer ese gol, tomando los recaudos. Si lo podemos hacer, creo que todo es posible”.
El planteamiento: “El compromiso estaba para nosotros. Creamos suficientes opciones en el primer tiempo para pensar que nosotros podíamos convertir. Pero precisamente en el momento que pensamos en empezar a conservar ese 2-1, que no hubiese sido malo para nosotros, fue cuando ellos nos hacen el tercer gol. Allí cambia la situación un poco. Uno tiene que sopesar qué es más importante, si defender un 3-1 o tratar de conseguir un 3-2. Creo que con el volumen ofensivo que teníamos y la entrada de Leo Castro, creo que era factible conseguir un segundo gol. Pero son cosas que suceden, y ahora nos toca reagruparnos, descansar y esperar a un buen equipo que seguramente vendrá a tratar de conservar esa ventaja. El fútbol me ha enseñado que no todo está escrito. Todavía hay 90 minutos”.
Las fallas: “Jugadores jóvenes, que ciertamente son nuevos para este tipo de gestas deportivas, son propensos en algún momento a cometer un error. Larry, por ejemplo, tuvo un gran primer tiempo, pero un lapsus nos costó el tercer gol. De igual manera. Castrillón hizo una buena labor conteniendo a Piedrahita, pero le faltó el peso para validar esa gran actuación con un gol que tuvo hecho y no lo convirtió. Ese tipo de cosas sucedieron, y ahora nos toca darles una palmada en la espalda y decirles que ya pasó. Hay que empezar a ver el próximo partido porque lo hecho, hecho está”.
La Suramericana: “Claramente Junior fue superior al equipo brasileño y debió haber ganado. Yo creo que está para ganar la Copa Suramericana. Tiene todo para hacerlo, y espero que lo haga. Pero nosotros estaremos esperándolos con nuestros argumentos futbolísticos y a tratar de jugar como lo hicimos en el primer tiempo, pero siendo más contundente para tratar de definir”.