Deporte de interés general
La Ley del Deporte data de 1990. Por ello, se plantea una nueva Ley que la sustituya y que se acomode a la realidad actual. En primer lugar habrá que tener en cuenta que hay aspectos, ligados especialmente a las sombras del Deporte, que modificaron la Ley del 90 y han sido desarrollados a través de otras Leyes como la coloquialmente conocida como Ley Antidopaje (2006) y otras aprobadas posteriormente, la Ley contra la Violencia, Racismo, Xenofobia e Intolerancia en el Deporte (2007) o la modificación del Código Penal contra el fraude deportivo (2009) entre otras.
La aproximación a la nueva Ley debe partir de la visión del Deporte y la Actividad física como una cuestión de interés general, dada su relevancia en nuestra sociedad por su transversalidad que se refiere a la Educación (valores, formación), la Salud (lucha contra la inactividad física y el sedentarismo), la Integración y Cohesión social (igualdad de género, diversidad, discapacidad), Economía, Ciencia, Tecnología e Innovación, Cultura, Turismo, Relaciones Internacionales, etc…
Una de las medidas debiera ser la regulación del Deporte Profesional con la ampliación del concepto a nivel individual (ahora, en teoría, no existe ni en tenis, atletismo, natación… según la Ley del 90) y potenciar los derechos de los deportistas. Así mismo cabría revisar el modelo del deporte colectivo ampliándolo a otras especialidades, analizar la validez del actual modelo jurídico de los Clubes Profesionales y su modificación o no, así como las relaciones entre Federaciones y Ligas Profesionales. También habría que considerar más el importante papel de los Sindicatos de Deportistas en el modelo. El objetivo es un sistema solvente, saneado y sostenible, y aunque ya se han dado pasos importantes hay que seguir avanzando en la racionalidad económica, la gestión eficiente y el buen gobierno de las organizaciones deportivas. Como referencia recomiendo el estudio y la aplicación de las conclusiones (que no hayan sido ya realizadas) de la Subcomisión sobre el Deporte Profesional en España del Congreso de los Diputados en el 2010.
El modelo federativo debe seguir siendo defendido en la nueva Ley reconociendo el papel de las Federaciones y apostando por las buenas prácticas. Es necesario coordinar las actuaciones de las Federaciones Españolas y Autonómicas con el CSD y las Comunidades Autónomas.
Pero es indispensable darle a la Ley una nueva mirada social. El CSD debe ser el referente de las políticas deportivas a nivel del país. Por ello recomiendo que en una Disposición Adicional figure la elaboración de un Plan Nacional del Deporte y la Actividad Física en el plazo que se estime oportuno y que contemple la visión transversal del deporte en la sociedad a la que me refería anteriormente. Su punto de partida podría ser el Plan A+D, elaborado por más de un centenar de profesionales y aprobado en 2010 en la Conferencia Interterritorial del CSD con CC AA y vigente hasta 2020 (ver página web del CSD). El papel de la colaboración con las Administraciones Públicas, especialmente CC AA y también Ayuntamientos (FEMP) es clave para su desarrollo. La acertada creación de una Conferencia Sectorial este año, con participación de los consejeros autonómicos, es una herramienta muy útil para su aplicación.
Así mismo, otra Disposición Adicional debería contemplar, como ha manifestado la Secretaria de Estado en el As, un Plan de Igualdad de Género que permita cerrar una desigualdad patente en el mundo del Deporte entre la mujer y el hombre.
Por otro lado debería contemplarse la aprobación de una Ley de Regulación de las Profesiones Deportivas que armonice las ya aprobadas por algunas de las Comunidades Autónomas.
Las Leyes son importantes, pero las políticas que las desarrollen son imprescindibles. Para ello es fundamental una financiación suficiente desde los Presupuestos para conseguir los objetivos marcados. Comparto con los portavoces de los Grupos Parlamentarios y el presidente de ADESP (como se pudo leer en As) de revertir al Deporte lo que el Deporte genera, concretamente en las apuestas deportivas. Por ello sería una gran noticia la modificación de la legislación sobre el Juego en ese sentido dentro de la nueva Ley del Deporte.
Por último, animo a buscar la unanimidad o el máximo consenso político como se percibe en estos temas y hacer entre todos que el Deporte sea una cuestión de interés general.