El Roma se despierta y remonta dos goles
Tras una gran primera mitad del Atalanta, que acabó 1-3, los de Di Francesco se volcaron al ataque y salvaron el empate.
La Serie A sigue regalando partidazos: Roma y Atalanta dieron espectáculo en el último choque de la segunda jornada con un inolvidable y justo 3-3. Un enfrentamiento con dos guiones muy distintos, uno para cada mitad.
Fue una tarde triste para el ‘romanismo’. Tras cinco años en la capital italiana, se fue, entre lágrimas (“Me vendieron”, dijo en Trigoria despidiéndose) Kevin Strootman, nuevo jugador del Marsella por 28 millones de euros. Los tifosi no apreciaron la operación, pero tras apenas dos minutos el partido del Olímpico hizo olvidar los problemas del mercado: Pastore se presentó ante sus nuevos tifosi con un golazo de espuela después de un centro de Ünder.
Sin embargo, esta jugada fue la única alegría giallorossa en la primera mitad: la típica presión hombre a hombre de los de Gasperini, que hizo rotaciones pensando en el partido de Europa League ante el Copenhagen, desconcertó a los locales, que se desmoronaron. Hasta el descanso, fue una exhibición de los ‘orobici’, con Duván Zapata como protagonista: el colombiano, en el 19’, golpeó el palo tras una gran jugada personal y Castagne aprovechó el rebote para empujar el balón entre palos a puerta vacía.
Luego, el punta se deshizo de Manolas en un contragolpe y centró para Emiliano Rigoni, que firmó el 1-2 en el 22’. El argentino celebró su estreno italiano hasta con un doblete, cuando en el minuto 38’ recuperó el esférico, completó una pared con Pasalic y fulminó a Olsen con un zurdazo cruzado.
Di Francesco, para recuperar el partido, sacó a Nzonzi y Kluivert en el lugar de Cristante y Pellegrini, pasando a un ofensivo 4-2-3-1. A partir de entonces, los suyos dominaron el enfrentamiento y recuperaron la desventaja con Florenzi en el 60’ (que abandonó el campo, después, por un problema en la rodilla) y Manolas en el 82’. El asalto giallorosso produjo más ocasiones para Dzeko y Schick, pero también le dejó espacio a los contrataques de los nerazzurri, que sin energías no supieron hacer más daño. El empate, merecido, deja a ambos conjuntos con 4 puntos, dos menos que Juve, Nápoles y SPAL, líderes del Calcio después de dos jornadas.
