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Zidane pone buena cara a lo de Neymar

La información de Manu Sainz según la cuál el PSG sólo vendería a Neymar por 400 millones no asustó a Zidane. Ayer, claro, fue preguntado por ello en la conferencia de prensa prepartido contra el Eibar. Primero, dijo que Neymar es jugador para cualquier equipo del mundo, una obviedad, y no le puso ninguna pega. Sobre el precio, brutal, explicó que él costó 72, que entonces pareció una enormidad, que ahora andamos por los 222 de Neymar y que quizá en diez años, o antes, lo de 400 no parezca descabellado. Vino a dar su respaldo moral a una operación con la que Florentino coquetea desde la entrega del último Balón de Oro.

Aquella noche no descartó que su siguiente objetivo fuese Neymar, lo que puso las orejas muy tiesas a ‘Papá Neymar’. Cada vez que se mueve el chico llueve dinero. La caída del PSG ante el Madrid tiene también su importancia, porque el sueño de ser eje de un proyecto nuevo y ganador se enfría. El PSG empieza a parecernos a todos como un mechero de esos de antes, que por más que le des a la ruedita no termina de encenderse. Cunde la impresión de que el verdadero fútbol anida en la vieja aristocracia de los clubes europeos, ante los que el PSG no deja de ser un pretencioso y ‘snob’ nuevo rico. Por ahí tampoco se va al Balón de Oro...

Otra cosa es que de verdad el Madrid llegue a los 400. Lleva tiempo gastando menos, pero aun así... Y está por medio la promesa de reforma del estadio, un capricho al que se ha comprometido reiteradamente Florentino. Y luego está la desconfianza de gran parte de la afición. Se ve en nuestra encuesta, se escucha en la calle. Neymar es un jugador fabuloso, incontrolable en su juego y con un valor de ‘marketing’ sensacional. El único que se acerca a Cristiano y Messi, sólo que es más joven. Pero tiene unas maneras personales que echan para atrás y la mezcla con Cristiano podría ser explosiva. De ahí que tanta gente lo mire mal.