Garoppolo firma el mayor contrato de la historia de NFL
Se ha convertido en el quarterback, y el jugador, mejor pagado de la historia de la NFL. 137,5 millones de dólares por 5 años, 27,5 millones al año.
Jimmy Garoppolo se ha convertido en el quarterback, y el jugador, mejor pagado de la historia de la NFL. 137,5 millones de dólares por 5 años, 27,5 millones al año. Nada que objetar a la frase, al título, al hecho de que su agente quiera que todos los que seguimos, escribimos, hablamos y opinamos sobre la NFL tengamos que decir que el récord ha caído. Aunque sea por sólo medio millón de dólares al año con respecto al anterior plusmarquista, Matthew Stafford de los Detroit Lions.
Porque de eso se trata, de eso y no de otra cosa. El mercado de quarterbacks franquicia en la NFL es tan escaso que no tiene ningún sentido hablar de precios o negociaciones, pues los primeros están fijados de antemano ante la inflexibilidad absoluta y las segundas sólo se centran en temas más espinosos como el garantizado, el garantizado por lesión, los días en los que se ejecutan los salarios anuales (mucho más importante de lo que parece), el lenguaje de escape de ambas partes, etc.
Es muy sencillo de entender: hay 32 franquicias en la NFL, hay menos (bastantes menos) de 32 quarterbacks franquicias en la NFL; los equipos se dividen en dos, los que tienen uno de esos unicornios y los que matarían por tenerlo. Es por eso que cualquier quarterback con un mínimo de capacidad demostrada de ser titular, y que salga al mercado, se va a llevar el mismo dinero, esto es, el máximo, el récord, el mayor de la historia y demás sinónimos.
Es por eso que Jimmy Garoppolo se lleva 137,5 para poder superar a Stafford. ¿Son alguno de ellos el mejor QB de la liga? Pues no, claro que no, sólo son los que han llegado al mercado los últimos, y o les pagan eso en San Francisco y Detroit o se lo pagan en otro lado. Así de simple.
Lo vamos a ver en muy breve. Porque, mal que bien, el precio pagado a Garoppolo se entiende. Es un jugador con un potencial enorme y con la capacidad de ser una megaestrella. Tampoco tiene la más mínima relevancia que lo haya demostrado en siete partidos, como es su caso, o en siete temporadas, porque no le están pagando por lo que ya ha jugado sino por el potencial al que puede llegar a jugar. Ningún contrato en la NFL es por lo conseguido sino por lo que parece que se va a conseguir. Sin embargo, va a ser muy difícil explicar lo de Kirk Cousins a quienes no entiendan el argumento explicado en el inicio de este artículo, el argumento puro y duro de la escasez de oferta en el mercado de QBs de la liga.
Porque Kirk Cousins está suelto en el mercado, y eso hace que las ofertas le vayan a llegar, y que estas vayan a estar en el mismo rango que la de Garoppolo, cuando no superior. A fin de cuentas, para negociar con el ya QB franquicia de los San Francisco 49ers el equipo contaba con la "amenaza" del contrato de jugador franquicia, que es un impedimento que no tiene Cousins, libre y sin compromiso desde el próximo 14 de marzo.
¿Y después? Drew Brees tiene que ampliar su contrato. Es un caso diferente, porque tiene 38 años. Aún así, sus números anuales estarán en el mismo vecindario que el de sus compañeros de posición. Matt Ryan tiene que ampliar su contrato, que acaba tras la temporada 2018; esperad que gane al que quiera que sea el mayor de la historia por medio millón de dólares y no os equivocaréis mucho. Y luego Aaron Rodgers, lo que dará paz de espíritu temporal a los que creen que ser el mejor pagado tiene relación directa con ser el mejor en el campo.
Es completamente irrelevante lo que penséis de ellos de forma individual, y es irrelevante que sean mejores o peores jugadores. No estamos ante un mercado gradual sino ante uno binario: o eres un QB con rango de titular o no lo eres. Y si lo eres, se te pagará el máximo posible.
Y un último asunto, éste referido a que lo que importa es el garantizado y no el montante global. Eso no aplica a los quarterbacks tampoco. El garantizado suele rondar, más o menos, la mitad de lo firmado más una pizca. Sin embargo, en el caso de los QBs, y salvo catástrofe, estos gigantescos acuerdos se cobran enteros más allá del garantizado ¿O se ha cortado a Joe Flacco, Jay Cutler, Andy Dalton, Ryan Tannehill tras sus grandes contratos? Hay casos, por supuesto, pero la gran mayoría de ellos se cumplen enteros y se cobran las cifras mareantes que se dicen en un principio ¿Por qué? Vuelta a lo mismo, gente, vuelta a lo mismo: porque hay menos QBs titulares que franquicias. Y ese hecho lo explica todo, una vez más.