"Si desde mi casa me ven gritando no me van a dejar venir más". Julio César Falcioni intentó ponerle freno a la personalidad. El pasado 13 de diciembre fue sometido a una cirugía que duró 12 horas y lo dejó 9 días más en cuidados intensivos por un nódulo en la laringe. Regresó. Con Banfield a punto de jugar Libertadores, el médico lo mandó a los palcos, pero el corazón lo condujo al banco.
El amor todo lo cura… y si no, hace más fácil el camino.