Un Sainz paciente cede 18 minutos en la especial más larga
Tuvo un pinchazo y problemas con el cambio. Al Attiyah ganó la 12ª etapa seguido de Peterhansel, que se queda a 44 minutos del piloto madrileño.
No va despacio, va paciente, y de esta manera cada vez es más fácil visualizar la meta de Córdoba de este sábado. El reto para Carlos Sainz era superar la especial más larga de esta edición del Dakar entre Chilecito y San Juan, zona de ríos secos, navegación, arena y mucho calor antes de alcanzar el viejo Autódromo ‘El Zonda’ y pensar en lo que viene por delante. Y lo hizo cediendo 18 minutos con respecto a su principal rival y también compañero, Stéphane Peterhansel, que dice que lo tiene imposible y quiere una victoria de Peugeot pero que no cederá lo más mínimo hasta el último kilómetro cronometrado, quizás tampoco en los enlaces.
Un Sainz paciente cede 18 minutos en la especial más larga
“No hay nada que hacer, espero seguir manejando la diferencia frente a Nasser. Y nada más. No puedo estar contento con esta segunda posición pero nosotros cometimos un error en Uyuni, aunque no sea muy común, y Carlos está haciendo una carrera perfecta. Yo estoy muy feliz por él”, afirma el francés. Pero para ganar el Dakar hay que ganar a Monsieur Dakar y el madrileño todavía tiene mucho margen de maniobra, 44 minutos de ventaja. Además compite con Despres como escolta y principal asistencia en la carrera. Aunque no fue una etapa cómoda, sufrió un pinchazo en la segunda parte y durante los 15 kilómetros finales tuvo que completar el kilometraje sin pasar de la tercera marcha por un problema en la caja de cambios, por eso se escapó algún minuto más de la cuenta.
Peterhansel fue segundo en la etapa a dos minutos del vencedor, Nasser Al Attiyah. Se impacienta el qatarí esperando el fallo de los buggys, probablemente él será quien menos los extrañe el próximo año. Por ahora ya tiene prácticamente asegurada la tercera plaza en el podio final frente a Ten Brinke si le respetan los pinchazos, su principal lunar en este Dakar por las consecuencias de ir al límite en cada tramo. Por la mañana era Orlando Terranova quien lideraba en los primeros puntos de control, pero el paso adelante de los Toyota volvió a dejar fuera de juego al Mini de X-Raid, el equipo al que peor ha tratado la 40ª edición de esta carrera.
Fueron en total 523 kilómetros cronometrados, más que en ninguna otra jornada, para exprimir un poco más a la caravana en un ambiente seco y desértico. Isidre Esteve y Txema Villalobos empezaron con retraso, pero siguen en marcha con el 4x4 de Sodicars. También Óscar Fuertes y Diego Vallejo (SsangYong) sueñan con cruzar el último punto de control para que el Tivoli termine su primer Dakar. Cristina Gutiérrez, junto a Gabi Moiset, comenzó al límite de hora y corre contra el tiempo tras una noche sufriendo por problemas de turbo. Pero ya se ve Córdoba en el horizonte y un español marcha líder del Dakar.