Valverde y jugar bien al fútbol
Se vio tan insultante la superioridad del Barça en la segunda parte, que el 0-3 pareció corto. Pudo y debió ir a por más el equipo de Valverde, que a base de trabajar y poner sensatez, supo ser el mejor antidepresivo en agosto cuando Neymar se fue a París y dejó descorazonado al equipo y a la afición azulgrana.
Valverde y su tropa se van felices de vacaciones, aunque con el freno de mano puesto. Las sensaciones son inmejorables, pero hay que respetar las distancias con el resto de equipos y ser conscientes que el mal momento puede llegar de golpe. La lectura es que el Barça sabe que puede jugar muy bien al fútbol, además de ser un sólido bloque.
En enero, más, y para entonces se esperan los refuerzos de Rafinha y Dembélé. Vermaelen es solución y Piqué y Suárez regresaron a tiempo. ¿Messi? Ese siempre está. Siempre.