Cinco historias insólitas del Fútbol y la Navidad
Desde el "gol fantasma" del clásico entre River y Boca, a los equipos que se unieron para rendirle homenaje a Papá Noel. El fútbol tampoco abandona en Navidad.
Santa Claus FC, el único equipo navideño del mundo
Fundado en 1992 gracias a la fusión de los equipos Reipas y Lappi de Rovaniemi, ciudad finlandesa considerada como la casa de Papá Noel. El club adoptó como escudo la figura del viejo de barba blanca que reparte regalos por todo el mundo saliendo desde Rovaniemi en el mes de diciembre, fecha que el equipo aprovecha para festejar la navidad ya que la competencia en ese país va de marzo a octubre por las bajas temperaturas. Aunque el equipo ha estado siempre en segunda división, en 2016 por poco logran concretar un amistoso con el Bayern Múnich después de varios trinos entre los dos clubes. El Santa Claus FC juega en la segunda división del fútbol finlandés.
Boca vs. River, el "gol fantasma" de Suñé
El 22 de diciembre de 1976 se jugó la final por el torneo Nacional argentino entre Boca Juniors y River Plate en cancha neutral, el estadio elegido fue el de Racing. Por primera vez en la historia el Superclásico se jugó para definir un título que terminó siendo para los 'xeneizes' gracias a la viveza del mediocampista, Rubén José Suñé, quien aprovechó el descuido del arquero Ubaldo Fillol que mientras acomodaba su barrera recibió por sorpresa el remate Suñé sin poder reaccionar para evitar la caída de su arco. La jugada no pudo ser captada por ninguna cámara de televisión o fotográfica por lo que recibió el nombre del "Gol Fantasma".
El arquero que nunca abandonó
25 de diciembre de 1937, se jugaba en Stamford Bridge el partido entre Chelsea y Charlton. Mañana con mucha neblina en Londres y que permitió jugar el primer tiempo con una visibilidad aceptable, los dos equipos marcaron de a un gol y se fueron a los camerinos para esperar que en la segunda mitad la niebla se disipara un poco, sin embargo fue peor, pues el clima impedía ver más allá de cinco metros. Así fue como el arquero del Charlton, Sam Bartram, terminó esperando los ataques del Chelsea que nunca llegaron porque el árbitro decidió suspender el juego sin que nadie de sus compañeros se acercara a avisarle al arquero visitante, quien se quedó en el arco pensando que sus compañeros tenían el juego dominado a pesar de no marcar goles, pues no veía a sus defensas y tampoco sentía que la gente festejara por algún gol.
15 minutos después de estar atento y custodiando su arco sin recibir un solo balón, poco a poco fue apareciendo una silueta que caminaba, Bartram quedó sorprendido cuando pudo ver que quien se acercó era un policía para decirle que el partido se había cancelado, que el estadio estaba vacío y que en el camerino sus compañeros lo esperaban en medio de las burlas por el tiempo que estuvo allí sin que nadie le avisara que ya no se jugaría más.
Tregua de Navidad 1914
Durante la Primera Guerra Mundial, alemanes e ingleses, dieron una lección de tolerancia y reconciliación con un partido de fútbol en medio de lo que se llamó "tierra de nadie" un espacio entre las trincheras, donde lo más común por esos días era ver soldados caídos en medio del combate. Ahí apareció la pelota, en la noche del 24 de diciembre de 1914, cuando los alemanes decidieron cantar "Noche de paz" para proponer una tregua que sus "enemigos" británicos decidieron replicar dejando sus fusiles y tomando el balón que el soldado escocés al servicio del ejército británico, Tom Palmer, había sacado de su trinchera para jugar un partido de fútbol que les hizo olvidar por una hora los motivos por los que llegaron a ese lugar.
En 2014 se cumplieron 100 años del emotivo acto y la UEFA decidió inmortalizarlo con una escultura en la zona de Ypres en territorio belga, donde se jugó aquel partido.
Navidad, cerveza y fútbol
En Inglaterra es costumbre jugar después de Navidad y Año Nuevo, sin embargo, en 1931 los jugadores no tenían tanta mesura para festejar teniendo en cuenta que jugaban al día siguiente. Así le ocurrió al Leyton Orient, equipo que ahora juega en la quinta división de Inglaterra y que para ese año vivió una derrota de la que pocos jugadores del club recuerdan por los efectos del alcohol. Todos se dieron cita en la estación de Waterloo para tomar el tren que los llevara a la cancha del Bournemouth, uno a uno fueron llegando sin poder disimular su alto estado de embriaguez, aunque pensaban que iban a ser reprochados por el cuerpo técnico, la sorpresa fue mayor cuando el DT los recibió en la estación del tren con un barril de cerveza.
Los jugadores del Orient salieron a la cancha del Bournemouth muy borrachos, a pesar de su estado lograron marcar un gol pese a la derrota 2-1. Uno de los jugadores terminó desmayado en la grama.