El delantero de invierno es Bale
Cuando se habla de este futbolista hay que cruzar los dedos y no pecar de optimismo, pero los dos ratitos que ha jugado Bale desde su lesión evidencian que es el mejor fichaje de invierno si se mantiene sano. El galés ha vuelto con hambre y está en la pelea por recuperar el tiempo perdido. Ningún fichaje que pueda llegar en este mercado va a poder igualar las prestaciones del de Cardiff. Si su físico no le permite jugar 90 minutos con regularidad igual hay que valorar la posibilidad de meterle en el campo cuando el rival esté cansado y el partido ofrezca más espacios.
En una palabra, dosificarle. Para que no se rompa y pueda tener el máximo rendimiento con la menor cantidad de minutos posibles. En verano será el momento de tomar decisiones trascendentes y afrontar un fichaje de los que le gustan a Florentino para echar una mano a Cristiano, pero hasta ese momento mejor centrar todos los sentidos en mimar a Bale que gastarse una fortuna en un remiendo que el año que viene va a ser suplente en todos los partidos.