Dybala, en 'Vanity Fair': su sueño, drama y dilema en Italia...
'La Joya' dio una entrevista a esta publicación en la que habló de temas más personales, pero siempre relacionados con el fútbol.
El internacional argentino Paulo Dybala, actual delantero del Juventus, ha asegurado que sueña con ganar el Balón de Oro desde que era niño y que conquistarlo supondría un "mensaje importante para muchos chicos".
"Cuando en verano nos reuníamos al lado del fuego, cuando éramos niños, les comenté ese deseo a mis amigos. Ganarlo sería un mensaje importante para muchos chicos", afirmó Dybala en una entrevista publicada este miércoles en la revista italiana "Vanity Fair".
"(Sería un ejemplo) para los que nacieron en un sitio lejos del centro de las ciudades y que pueden soñar con contar una historia parecida a la mía", agregó el jugador nacido en Laguna Larga, en las inmediaciones de la ciudad argentina de Córdoba (norte), hace 24 años.
La 'Joya' subrayó que el talento no es suficiente para convertirse en un futbolista de máximo nivel y explicó que trabaja a diario para superarse. "Dios nos da un don, pero luego ese don hay que trabajarlo. Vi muchos fenómenos en los equipos juveniles. Chicos de los que se decía 'si solo hubiese tenido fuerza mental habría podido ser como (los argentinos, Diego) Maradona o (Lionel) Messi'", aseguró. "Yo trabajé sobre todo para evitar esto", insistió.
En la entrevista, el argentino, que tiene ciudadanía italiana, confesó además que hace unos años le propusieron jugar con la selección "azzurra" y admitió que en ese momento no fue fácil rechazar la oferta. "Me propusieron llevar la camiseta 'azzurra' y estuve muy agradecido. Tenía 19 años y decir 'no, gracias' fue duro. Pero soy argentino y hubiera sido injusto", dijo.
Por lo que afecta a la vida de los futbolistas, Dybala opinó que no todos saben lo que pasa lejos de los reflectores y que en "la mayoría de las veces" los jugadores terminan siendo "hombres muy solos".
También repasó su difícil historia personal, ya que su padre falleció como consecuencia de un cáncer cuando Paulo tenía 15 años. "Fue un dolor fortísimo. En los meses previos (mi padre) no podía venirme a ver y mi equipo me dio la posibilidad de quedarme en casa durante un tiempo. Seis meses eran poco y tuve la tentación de dejarlo todo", admitió el argentino.