Ricardinho: "El espejo del futsal debe ser la NBA, no el fútbol"
El portugués lidera a un Movistar que es anfitrión del grupo D de la Ronda Élite de la UEFA Cup. Sólo uno entra en la Final Four. Hoy debutan ante el Braga (21:00, Eurosport2).
El Movistar Inter es desde hoy en Torrejón el anfitrión del ‘grupo de la muerte’ de la UEFA Cup, la Copa de Europa de fútbol sala. Hoy arranca la Ronda Élite ante el Sporting de Braga portugués (21:00, Eurosport2), el Deva rumano y al Kairat kazajo, doble campeón y a priori la gran amenaza en la lucha por la única plaza en juego para la Final Four. Y el equipo liderado por Ricardinho, vigente campeón, no quiere fallar en casa. “Nos tocó la ‘bola negra’ en el sorteo y ahora afrontamos una semana en la que no podemos cometer ningún error”, explica el astro portugués a As.
Él es el rostro más mediático de un equipo que conquistó la temporada pasada el triplete (Liga, Copa de España y Copa de Europa) y que aspira a superar esa marca (ganó la Supercopa y está vivo en otras cuatro competiciones): “Somos un grupo irrepetible, que ha conseguido once títulos en cuatro años y quiere seguir haciendo historia. Cuanto más ganemos, más difícil será que otro nos iguale”. El luso se siente “en casa” en las filas del Movistar y acaba de renovar hasta 2020: “Nunca se sabe qué pasará en el futuro, pero estoy feliz, juego en el mejor club del mundo”.
Y esa felicidad la transmite en la pista, no sólo con goles y asistencias, sino con un buen número de gestos técnicos que levantan los aplausos hasta de las aficiones rivales: “Siempre intento dejar algún detalle. Ahora estoy entrenando algunas cosas nuevas, a ver si soy capaz de hacerlas en un partido porque cada vez es más difícil sorprender a los rivales, pero eso también me obliga a mí a seguir mejorando. Pero es bueno que se hable de eso, y no sólo de Ricardinho, sino de muchos jugadores espectaculares... ¿Ha visto el gol que marcó Dani Martín con el Jaén?Es sólo un ejemplo de lo que se ve cada fin de semana”.
Porque Ricardinho es consciente de que su deporte está viviendo un momento clave, en franco crecimiento, incluso sueña con que llegue a ser olímpico, pero lo principal es que refuerce su identidad de disciplina espectacular. “Hay que definir qué queremos ser. No podemos intentar parecernos al fútbol. Es el deporte rey. Punto. Quizá el espejo donde debamos mirarnos es la NBA en el sentido de que debemos vender este espectáculo, que es nuestro, que se basa en goles, regates, remontadas en el último segundo... Sabemos que es un producto atractivo”.
Un producto que hay que cuidar, como ya ha reclamado en alguna ocasión su técnico, Jesús Velasco, criticando la permisividad arbitral con acciones que rozan lo violento: “Tenemos una opinión similar. La intensidad es espectáculo y creo que se dejan de pitar faltas para no parar el ritmo, para dejar jugar, pero corremos el riesgo de que se rompa la magia de este deporte”.