Hamilton hace su pole 70 en el GP de Malasia
El británico hizo una gran vuelta con Raikkonen y Verstappen segundo y tercero. Seb con problemas de motor.
Apenas levantaron la cara algunos, la tristeza estaba ahí, pero Sebastian Vettel tuvo el detalle. El alemán fue saludando uno a uno a sus mecánicos e ingenieros después de bajarse del coche rojo. Jock Clear Unos minutos antes Riccardo Adami, su ingeniero de pista, le decía unas palabras malditas para todo piloto: "Ok, box". Le mandaba regresar despacio porque los problemas en el motor de su Ferrari habían regresado. Ya en los últimos libres el tetracampeón se había encontrado con una avería en su unidad de potencia y la gente de la Scuderia tuvo que cambiar el motor de combustión y el MGU-K en lucha contra el reloj para llegar a la sesión clasificatoria. Lo lograron. O casi. Porque finalmente Seb no pudo volver a la pista despues de su vuelta en la Q1 y se quedó ahí.
Saldrá último en busca de una remontada imposible. O quizá no tanto. Tiene coche, manos y posiblemente también lluvia. En el recuerdo de algunos en Ferrari la figura de Fernando Alonso. Y más allá la remontada del 22º al 7º en 2016 con el McLaren… Honda en una primera vuelta en la que se puso duodécimo. O en 2004 cuando salía 19º y acabó 7º en una primera vuelta en la que se colocó décimo. Esas cosas de Alonso. Clásicos. Grandes éxitos. Ahora Vettel tiene oportunidad de hacer algo parecido. O mejor. Porque tiene coche para hacerlo.
Mientras, ahora el que fue su gran rival asturiano en aquellos años de 2010 y 2012, lucha ahora por volver a la dignidad del campeón. A la normalidad. Y en esa batalla y con estas armas lo máximo que puede hacer es llevar su coche a donde no puede llegar. Pero en la calificación de Malasia no lo hizo. Décimo el español, pero su compañero Vandoorne partirá séptimo. Y en teoría es Fernando el que lleva las mejoras de chasis de McLaren. ¿Será que esas mejoras no lo son en realidad y el coche iba mejor sin esa evolución? Es una posibilidad...
Pero hablábamos de oportunidades de verdad y ahí otros pilotos tienen también oportunidades diversas. La tenía Kimi Raikkonen de hacer la pole. La tiene Lewis Hamilton de seguir sacando puntos en el campeonato. De los pilotos de Red Bull para estar de nuevo en el podio. Esos son los grandes beneficiados de lo que le pasó a Vettel. Y Hamilton cuando tiene la oportunidad la suele aprovechar. Después de un fin de semana en el que parecía no salirle nada, llegó el momento y logró la pole. Otra más. Setenta. 70. Lo escribo en letra y con el número para que lo entendamos bien y comprendamos la magnitud de la cifra. Tremendo. Igual que Lewis lo hizo, Raikkonen no lo consiguió. Por poco. Menos de una décima. Y Vettel baja la cabeza lamentándose.
Tercero saldrá Max Verstappen. Cuarto Ricciardo. Ahí está la opción de podio para los Red Bull. Otros que, si no pasa nada, aprovechan siempre la ocasión. Pero volvamos al primero. La pole esta vez no fue solo de Mercedes, fue ante todo de Hamilton. Su compañero Bottas sale quinto. Esa es la clave. Está con estrella el inglés. Brilla. Y cuando alguien brilla poco se puede hacer mas que admirarlo. Pero la carrera aún no se ha disputado. Y hay un 80% de posibilidades de lluvia para este domingo, aunque a la hora de la carrera baja al 55% bajando hasta un 22% durante la prueba. Veremos…
Entre los que espera agua, Carlos Sainz, decimocuarto por delante de su compañero Gasly, con un Toro Rosso muy pobre aquí. Vettel, Alonso… también esperan lluvia. Hamilton, solo espera volver a ganar.