Comienza la parte más exigente de la Vuelta

Etapa muy rápida, una media, en las dos primeras horas, de 52 kilómetros por hora. Veníamos de una jornada de descanso y los corredores sabían que la fuga podía llegar, aunque el pelotón no lo ha puesto nada fácil al principio, no ha permitido que se formase la escapada hasta pasado el ecuador de la carrera. Una pena lo de José Joaquín Rojas. El ciclista español lo ha hecho casi todo bien durante el día, escogió el grupo correcto para llegar a la cabeza, se mantuvo en él pese a los cambios de ritmo y atacó en el descenso, pero no fue suficiente para ganar a Trentin que demostró su velocidad al sprint. Movistar hace bien en buscar el triunfo de etapa.

Nibali, consciente de la dificultad y del riesgo que suponía bajar rápido Collado Bermejo, lo intentó, buscando dejar atrás a los favoritos para recortar tiempo en la clasificación general. Su estrategia no surgió efecto y continúa cuarto a un minuto y diecisiete segundos de Chris Froome. Nicolas Roche recortó 29” y está empatado a tiempo con Chaves, aunque el jefe de filas del Sky reconoció que no le preocupaba el corredor irlandés, le han dejado ir.

Mañana comienza la segunda parte de la Vuelta. Cambio con respecto a lo que hemos visto estos días. Puertos largos con mucha exigencia en los que vamos a ver de qué es capaz cada corredor. Debe haber movimiento de aquellos que quieran aspirar a los primeros puestos de la general, el principal señalado para ello es Alberto Contador. El madrileño tiene mucho tiempo que recuperar y debe intentarlo cada vez que tenga oportunidad.