Caracol Radio
NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

FRANCIA | LA INTRAHISTORIA

Las cláusulas prohibitivas que han dejado de serlo

Temor en los clubes ante la evolución del mercado. Era utópico pagar 222 millones de euros por un jugador y ya es una realidad.

Griezmann vale 200 millones hasta el 1-S, luego 100.
Pepe AndrésDIARIO AS

La salida de Neymar al PSG ha reventado el mercado de fichajes. El club parisino pagó por el brasileño su cláusula de rescisión, 222 millones de euros, algo impensable hace poco tiempo y que ha generado preocupación en los clubes españoles. No es para menos. Porque lo que antes parecía un imposible, hoy en día es factible. Parece que de nada sirve poner cláusulas de rescisión prohibitivas y que disuadan al comprador cuando hay clubes con capacidad económica para hacer frente a dichos fichajes. Un nuevo ciclo apunta en el horizonte del fútbol mundial con los petrodólares de PSG o City, las inversiones del fútbol chino, los clubes/Estado y los nuevos empresarios que llegan al deporte rey buscando negocio.

Sólo en LaLiga funcionan las llamadas cláusulas de rescisión, un esfuerzo de los clubes para que los más grandes no se lleven a sus estrellas. Pero lo que parecía utópico, los 222 millones por Neymar, es ya una realidad. Por eso, los 200 millones que vale Griezmann hasta el 1 de septiembre (desde entonces costará 100) ya no es un impedimento para que se concrete su salida. Lo mismo le ocurre al Atlético con Saúl y Koke (150). Incluso los 300 millones que vale la cláusula de rescisión de Messi se antojan pocos. Más tranquilo parece el Real Madrid. Y es que la bbC tiene 1.000 millones de cláusula cada uno. Pero, qué pensarán otros clubes más pequeños, que ven con temor cómo sus mejores futbolistas pueden salir por una cantidad que ni se acerca a los 222 millones por Neymar. Así por ejemplo, la cláusula de Laporte con el Athletic es de 65 millones, o la de Enrich por el Eibar de sólo 20, incluso la de Soler, un proyecto de grandísimo futbolista che, es de 80. Más curiosa es la del realista Oyarzabal, de 50 millones para cualquier club menos para el Athletic, que es de 60.

¿Y qué sucede con el resto de equipos que no tienen cláusula? Pues toca negociar. Y es entonces cuando se puede apreciar que el mercado se ha vuelto loco. Dembélé, el nombre de moda, sólo le costó al Dortmund 15 millones el curso pasado. En este ya han desechado una oferta del Barcelona de 110. El Mónaco pagó por el lateral Mendy el año pasado 13 y lo ha vendido al City éste por 57,5. Los precios se seguirán inflando, pero mientras haya clubes con dinero para acometer los fichajes..