La ‘Selección de Benahavís’

La Selección de baloncesto se concentra desde mañana y hasta el día 23 en Benahavís, un rincón delicioso escondido entre Marbella y Estepona. Un pueblo con las bondades de la montaña que tiene a siete kilómetros la playa. Allí echa a andar una iniciativa pionera de la FEB y Sergio Scariolo. AS, que adelantó la noticia, habló de Selección B porque, en el fondo, sólo uno, dos a lo sumo, de los 16 jugadores de esta concentración estará en el Eurobasket. Al presidente Garbajosa no le convence el término. Un buen número de estos seleccionados serán quienes defiendan a España desde el 24 de noviembre cuando se reabran las Ventanas FIBA. Serán los que, a falta de los NBA (contra quien FIBA no alza la voz), estén obligados a clasificarnos para el Mundial de China de 2019.

Esta ‘Selección Benahavís’ no tiene mediáticos. Hay veteranos como Pau Ribas (30) que vienen a completar su proceso de rehabilitación después de romperse el tendón de Aquiles en octubre. Maduros como Quino Colom que persiguen un hueco libre en el puesto de tercer base. Grandes confirmaciones de esta temporada como el jovencísimo núcleo de Valencia (Vives, Sastre y Oriola) y proyectos de estrella como Alberto Díaz o Diop. Hay hasta un toque universitario yankee: Sebas Saiz (Ole Miss) y Rubén Guerrero (South Florida). De los 16 convocados para Benahavís, ocho jugarán Euroliga, cuya competición no parará durante las Ventanas y que deja a los jugadores la patata caliente de decidir qué harán. Un desarreglo muy aparatoso y poco acorde a estos tiempos.