Mayweather-McGregor: 3 horas tarde y billetes al aire en NY
Nueva York rozó el primer intercambio de golpes. Un tenso careo que fue finalizado antes de tiempo. Londres finalizará la gira.
La tensión en Toronto había quedado en todo lo alto, llegaba el momento de dar un paso más y lo hicieron. Mayweather y McGregor perdieron las formas en su tercer careo. En un evento con mucho ego y en el que se busca siempre la competición los dos decidieron comprobar quien tardaba más en llegar al Barclays Center de Brooklyn (Nueva York). Mayweather se demoró una hora en Canadá y en Nueva York también volvió a ganar ese irracional certamen. Money tardó más, el público fue el que perdió. Casi tres horas de espera para que arrancasen las actuaciones musicales. Demasiado desplante incluso para un show como éste.
Tocaba pedir perdón como mejor saben hacerlo, ofreciendo espectáculo. Lo lograron. McGregor olvidó los impolutos trajes: gafas de sol, pantalón estampado, sin camiseta y con un abrigo cubriendo sus hombros. Buscaba destacar y lo consiguió. Por su parte Mayweather optó por un look sin demasiados cambios: sudadera y gorra, pero no se olvidó de la bandera de Irlanda. Quería volver a provocar a Mayweather. Ambos bailaron al salir al escenario, Mayweather no buscó la confrontación en el primer momento… pero McGregor le ‘comió la oreja’ en cuanto pudo. Money siguió bailando y de nuevo, ‘pistolas’ y segundos larguísimos con un cara a cara sin movimientos, hasta que pegaron casi sus caras. McGregor se quitó el abrigo y las gafas quería intimidar. Los segundos parecían horas y el público rompió a animar a Mayweather, estaba en casa y el público se decantó.
Tiempo para dirigirse al público, The Notorious recuperó su abrigo y sus gafas y de nuevo abrió el fuego. Se arrancó a cantar, buscó provocar a Mayweather… pero el boxeador se divertía con sus redes sociales. Después McGregor quiso atajar una de las polémicas surgidas en los careos, su supuesto racismo. “Yo también soy medio negro, de cintura para abajo”, apuntó. Después ya centró en Money. “Fuck you Mayweather”, repitió y nada más añadió. Tomó asiento y esperó a la réplica. Tenía el público en su contra, no quería abusar.
Mayweather quiso interactuar con los fans. Como en Los Ángeles todos los fanáticos le siguieron al grito de “trabajo duro”. Después fue a incitar a McGregor, habló de su dinero y lanzó un fajo de billetes sobre McGregor. El irlandés no entró en el juego… pero acabó cayendo. Un tumulto de personal de seguridad se cernió sobre él, después de que money se quitase sus cadenas de oro, nadie quería que llegasen a las manos. Mayweather se reía y hacía sombra. Después se levantaron y de nuevo ‘face to face’. Hubo el primer toque, McGregor buscó el contacto con su hombro, no fue a más. Nuevo careo, cada vez más tensión y Dana White hizo de bombero. Queda una bala en su careo, la rivalidad quema. El combate cada vez apetece más.