Más allá del Clásico de Miami: hasta 16 países visitará LaLiga este verano
Esos kilos de más. Para Sevilla, Athletic y Valencia se acabaron las vacaciones. Los tres tienen jefe nuevo en la oficina y mucho por hacer. Berizzo y Ziganda tienen la herencia de las previas de la Champions y Europa League, mientras que Marcelino debe reconstruir un proyecto en ruinas, el de Lim. Ellos fueron los primeros en cifrar esos kilos de exceso de sus futbolistas. El más rezagado en la vuelta al cole será el Girona, que lo hará el 17. Bueno, o el Getafe, que ultima fechas de pretemporada tras ser el último en decir “hola” a LaLiga Santander. Alargar la Liga 1I2I3 todo junio es un filón televisivo, pero condiciona la planificación de los agraciados. Salvo si haces un Levante y sabes desde abril que ascenderás.
Pretemporada. Tiempos de viajes, giras y bolos. Época de buenas intenciones y en la que hasta un rondo cobra otra dimensión si hay entrenador nuevo, que son ocho este curso: Valverde, Unzúe, Setién, Zubeldía, los tres que comenzaron ayer y el último en ser anunciado: Márquez por Las Palmas. Son semanas de los ‘Profe’ Ortega, Pintus, Mascarós, Toni Ruiz, Izaguirre y cuantos preparadores físicos que toman el mando en parajes de postal.
Sin viajes a China. El Deportivo dormirá con las botas puestas: 12 amistosos jugarán los de Mel, uno cada tres días. El Valencia hará de Willy Fog y viajará por siete países para ganar esos euros que no ingresará por Europa. En total, 16 países visitarán los clubes españoles. El Leganés, en su caso, pasará el verano en casa amortizando su nueva Ciudad Deportiva. Sólo dos se aventuran por Asia: el Sevilla por Japón; el Espanyol por Indonesia, compromiso adquirido en 2013, cuando jugó en su filial Arthur Irawan, hijo de un millonario de Yakarta. El Atlético hará un ir y venir a México. Ello tras pasar por Los Ángeles de San Rafael como hace desde 1972, cual típica visita al pueblo de los padres por las fiestas patronales. A China no va ninguno. Se acabó el maná en forma de billetes.
El Clásico. El Real Madrid y el Barcelona lucirán palmito en Miami por obra y gracia de Charlie Stilitano, el capo de la Copa Internacional de Campeones, torneo estival tan global como lucrativo. No hay billetes para ninguno de sus partidos y eso se traduce en ingresos. La diferencia de presupuestos en LaLiga no es sólo cosa del reparto de televisión. Márketing al margen, aquí en España, más con una Supercopa en agosto, un Clásico en julio será como una cerveza sin tapa: refresca pero no te llena.